La Cooperativa SanCor levantó la voz ante las recientes medidas de fuerza llevadas a cabo por la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (ATILRA) que han paralizado sus plantas lácteas, advirtiendo sobre las consecuencias económicas catastróficas que esto podría acarrear, no solo para la empresa, sino también para los productores de leche y la economía en general.
La empresa láctea, una de las más grandes de Argentina, alertó sobre la gravedad de la situación, destacando que, si persisten las medidas de fuerza, se verán comprometidos los recursos necesarios para cumplir con sus obligaciones, incluyendo los pagos salariales a sus empleados.
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“Si se resiente la recaudación, no habrá recursos para la cancelación de obligaciones de ningún tipo, incluso las salariales”, advirtieron.
Las medidas de fuerza implementadas por ATILRA dejaron prácticamente paralizadas las operaciones industriales, comerciales y administrativas de SanCor. Esto amenaza con dejar a más de 3 millones de litros de leche sin procesar y poner en riesgo el sustento de los productores que dependen de la cooperativa.
SanCor, en un intento por encontrar soluciones a la situación crítica que atraviesa, ha manifestado su disposición a considerar propuestas de negocios de actores económicos y empresas interesadas en participar en la actividad láctea.
La declaración de la empresa también arroja luz sobre el contexto que ha llevado a la actual crisis. SanCor ha estado inmersa en un profundo proceso de reestructuración durante los últimos años, buscando equilibrar sus operaciones y organización.
