Este domingo, a los 83 años, falleció Jorge Cupeiro, uno de los mejores pilotos de la década del sesenta, que fue uno de los grandes guerreros que corrió en las legendarias 84 Horas de Nüburgring con los Torino preparados por Oreste Berta.
El Gallego, que sufría una dura enfermedad, fue uno de los mejores pilotos de su época donde logró 41 victorias en todas las categorías que corrió, entre ellas el Turismo Carretera donde pilotó el mítico Chevitú, uno de los autos que cambió la historia de la categoría y con el cual peleó el campeonato con los Hermanos Emiliozzi.
También integró la Misión Argentina con los Torino en Nürburgring. Corrió a bordo del Torino 380W TC N°2, compartiendo butaca con Gastón Perkins y Eduardo Rodríguez Canedo. Lideró gran parte de la competencia, debiendo abandonar debido a un despiste.