A pocas horas de la peor crisis política de su Gobierno, Alberto Fernández convocó para este viernes a las 11:00 a todo su gabinete.
Afectado por el revuelo que se originó por la filtración de las imágenes de las fiestas en Olivos durante la cuarentena, el jefe de Estado busca cambiar de actitud.
Después de un año y medio de reuniones parciales y por tema, por primera vez desde el comienzo de su gestión, Alberto recibirá a sus 21 ministros nacionales.
Sin éxito por ahora, el oficialismo intenta dejar el escándalo atrás. Según indicaron desde el Ejecutivo a TN, en la reunión se analizará la gestión y fundamentalmente las líneas centrales para aportar a la campaña electoral para las PASO del 12 de septiembre. Pero, además, será otro gesto tendiente a cerrar filas frente al desgaste de la figura presidencial y del Gobierno por los encuentros sociales en Olivos.
Hasta ahora, el mandatario había encabezado encuentros del Gabinete Económico y gabinetes temáticos. La mayoría de las reuniones ministeriales del último año y medio las llevó adelante el jefe de ministros, Santiago Cafiero.
La última vez que Alberto Fernández se mostró junto a todos sus ministros fue en diciembre del 2020, y también se trató de un encuentro organizado para dar una señal política, en este caso hacia la interna oficialista. Pero no correspondió a una reunión de Gabinete.
Ver: Kirchnerismo unido: Cristina le dijo al presidente que “ponga orden donde tenga que poner orden” y que no se ponga nervioso
En aquel entonces, el Presidente llamó a sus funcionarios a un asado de fin de año luego de una serie de críticas de Cristina Kirchner. “Los ministros que tengan miedo o no se animen, que vayan a buscar otro laburo”, había dicho la vicepresidenta días antes.
La reunión de este viernes es la continuidad de una serie de actos que Alberto Fernández realizó durante los últimos días, luego que estallara el escándalo por la fiesta de cumpleaños de la primera dama en la Quinta de Olivos. La polémica generó fuertes críticas y pases de factura dentro de la coalición gobernante.
El discurso presidencial pasó de un liviano pedido de disculpas al enojo a las muestras de “fuerza”: “Si piensan que me van a hacer caer por un error que cometí, sepan que me fortalecen”, dijo Fernández en una de sus apariciones.
El martes y el miércoles, se mostró acompañado por Cristina Kirchner y los principales referentes del Frente de Todos. La propia vicepresidenta le pidió que ponga “orden en lo que tengas que poner orden”, una frase que una vez más fue leída como una señal hacia los ministros y funcionarios de mayor confianza del mandatario.