Simpatizantes de Jair Bolsonaro no aceptan que Lula Da Silva sea el nuevo presidente de Brasil. Por este motivo, han bloqueado varias carreteras del país. Actualmente se registran 160 caminos afectados. El número bajó ya que ayer habían cerca de 270 bloqueos.
Bolsonaro dijo que acepta las manifestaciones políticas pero afirmó que los métodos de las mismas “no pueden ser los de la izquierda, que siempre perjudicaron a la población, como la invasión de propiedades y la destrucción de patrimonio” .
Además, sostuvo que no pueden cancelar “el derecho de ir y venir”.
Después del resultado de las elecciones, Jair Bolsonaro no habló específicamente de la victoria de su contrincante. Solo se limitó a decir que “seguirá cumpliendo todos los mandatos de la Constitución” y agradeció a todas las personas que lo votaron.