En las últimas horas encontraron sin vida al rugbier Alan Calabrese en su casa de Mataderos, en Capital Federal.
Según cuenta el sitio Infobae, su padre fue quien avisó lo ocurrido a la Policía, que, al llegar constató la triste noticia.
El joven, de 22 años, jugaba en el club Ciervos Pampas, precursor en promover la diversidad sexual en el rugby.
Antes de la drástica decisión, redactó una carta de despedida en Instagram donde advirtió que sufría una “depresión tremenda” y que necesitaba “apagarse”.
“¡La sonrisa de la rica! Me encantaría que siempre me recuerden con esta sonrisa, que era la que tapaba todo el sufrimiento sentía por dentro. Siempre con la sonrisa encendida pero por dentro hace meses que venía sintiendo una depresión tremenda”, escribió.
“Perdón por hacerlo de esta forma. Mi camino terminó acá, quise, pero no pude seguir. Los amo, hasta siempre”, culminó.
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“Se fue mi hermano. Es muy triste, no pudimos ver que estaba tan mal para llegar a ese punto. Es mucho dolor, mucha impotencia”, dijo su hermana, Karen.
El año pasado, Calabrese fue invitado al programa Pampita Online donde reveló que dejó el colegio secundario por el bullying que sufrió durante esos años.
En los últimos días, el jugador había sido apartado del club que surgió en 2014.