Lionel Messi, el ícono del fútbol mundial, estuvo a punto de vestir la camiseta del Milán de Italia tras su repentina y polémica salida del Barcelona. A pesar de que finalmente optó por irse al Paris Saint-Germain (PSG), las negociaciones con el elenco italiano, lideradas por el legendario Paolo Maldini, dejaron un sabor agridulce tanto para el club italiano como para los fanáticos que soñaban con ver al astro argentino en el verde césped el San Siro.
Messi, cuyo paso por el PSG estuvo por desencuentros con la afición, recibió una oferta tentadora del Milán en medio de las turbulencias que rodearon su salida del Barcelona. Paolo Maldini, director deportivo del club en ese momento, reveló en una entrevista reciente en PoretCast que el club italiano había estado en la carrera por fichar al talentoso delantero argentino.
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“Cuando leí que Messi podía fichar por el Inter estaba furioso, así que durante 10 días intenté traerlo al Milan“, confesó Maldini, reflejando la determinación del club por asegurar la firma de Messi y devolverle el brillo a una institución que busca recobrar su gloria pasada.
Aunque el Milán no es el gigante dominante de antaño, la posibilidad de contar con Messi en sus filas ilusionó a los seguidores y despertó el interés de todo el mundo futbolístico. Del lado del número 10 argentino, no hubo un rechazo categórico a la propuesta, lo que mantuvo viva la esperanza de un posible desembarco.
Sin embargo, las esperanzas se desvanecieron cuando el PSG, con su imponente poder financiero, presentó una oferta que resultó ser irresistible para Messi y su entorno.
“Lo quería. Lo intentamos durante 10 días, pero entendimos que era simplemente imposible“, lamentó Maldini en medio de la charla.