Los repartidores de Pedidos Ya de Mendoza llevarán a cabo este jueves entre las 20 y las 0 horas una media de fuerza en el Kilómetro 0 de la capital con el fin de conseguir que la plataforma les aumente lo que reciben por el trabajo que hacen.
Hay en la provincia uno 1.350 deliverys trabajando de forma activa y por cada circuito finalizado cobran 65 pesos (35 pesos por el retiro y 25 por la entrega más 5 pesos del ítem propaganda). Lo que reclaman es que se les pague por lo menos 100 pesos.
Según la categoría en la que se encuentren estos trabajadores, pueden recibir entre 5 y 12 pesos más por kilómetro recorrido. Hoy unos 100 repartidores trabajan con la bicicleta, aunque la mayoría utiliza motocicleta.
“Hace más de un año que no tenemos aumento en los ítems de entregado y retirado y estamos pidiendo un aumento para al menos costear lo que nos sale el combustible de la moto o el mantenimiento del vehículo, que es nuestro capital de trabajo. Una cubierta de una moto sale 16 mil pesos. Amortizar el vehículo más lo que tenés que sacar por día no alcanza. En turnos de 12 o 14 horas no alcanza el sueldo”, aseguró quien fuera el encargado de armar la protesta a Explicito Online.
Asimismo, los repartidores cobran en dependencia de un sistema de turnos, que son de 3 horas, además de la categoría en la cual la aplicación los ubica.
La categoría 1 es la más remunerable, pero podrían caer de ese puesto con simplemente pichar una rueda y pedir asistencia o llegar tarde a entregar un pedido. Tampoco se pueden faltar los fines de semana y el sistema baja la categoría cuando el soporte técnico pone al trabajador en “pausa” cuando algún cliente cancela el pedido.
“Yo pago en el restaurante con dinero de mi bolsillo. Si el cliente cancela la app se demora entre dos a siete días en devolvérmelo, mientras tanto estoy en pausa en el soporte y es dinero con el que no cuento en el día a día”, rezonga Juan.
En tal sentido, agrega que “por ejemplo hay muchas personas que se quejan por las demoras, que en general son porque los restaurantes están llenos o saturados y le dan preferencia a los clientes que están en el local. Si llegás tarde y el pedido se cancela el dinero me lo reintegran pasados varios días”.
Con esta movilización se busca además visibilizar el trabajo que estos deliverys hacen con el fin de que los clientes sean empáticos a la hora de cancelar un pedido. “Hemos trabajado toda la pandemia. Estos días de lluvia por ejemplo yo me cambié la ropa tres o cuatro veces porque al llegar al lugar estaba pasada por agua”, aseguró Juan.
Es dable destacar que estos trabajadores, estando en bicicleta y moto, en la calle, no tienen ART.
Los repartidores deben cumplir con un horario de entrada y salida que les indica el empleador. “Si estás en categoría 1 podés elegir varios turnos de tres o cuatro horas. Pero si se te pincha la moto o te pasa algo ya descendés de categoría a 4. La empresa puede decidir extenderte el turno porque necesita cubrir otro cadete o extender las entregas y no podés decir que no”, explicitó Juan.
“Hay de todo, hay chicos de 18 años que trabajan en las vacaciones porque durante el año estudian, y hay gente grande, hay muchos que tienen más de 40 y no encuentran otro trabajo”, agrega para graficar quiénes están trabajando para la plataforma de pedidos.
Estos repartidores ya trabajan en estos días con el fin de crear una ONG con el fin de poder organizarse de cara a los reclamos.