El campeón olímpico Juan Ignacio “Pepe” Sánchez volvió a jugar oficialmente después de nueve años de retirado, para el equipo del club del que es presidente, Bahía Basket, frente a Gimnasia y Esgrima La Plata, por la Liga Argentina, segunda categoría del básquetbol argentino, a raíz de los casos de coronavirus que diezmaron al plantel.
A los 44 años el bahiense debió vestirse de jugador luego de gestionar una habilitación ante la Asociación de Clubes (AdC), después de la inactividad que inició con su retiro en 2013 en el club que hoy preside y por entonces se llamaba Estudiantes, de Bahía Blanca.
El proyecto que encabeza conllevó la construcción de un complejo de Alto Rendimiento donde el primer equipo de básquetbol juega como local, denominado Dow Center (allí lo hizo esta noche), erigido en las afueras de la ciudad de Bahía Blanca y con capacidad para 4.000 espectadores.
En lo deportivo al equipo no le fue bien en los últimos tiempos y cayó a la segunda división, donde hoy ocupa el último lugar, ya que luego de dos victorias seguidas llegó al juego de esta noche con tres caídas en fila.
El equipo masculino que juega en la Conferencia Sur es dirigido por la entrenadora, Laura Cors, quien dispuso la presencia de Sánchez en cancha por espacio de 29 minutos (no fue titular), para la victoria de su equipo sobre los platenses por 91 a 87 tras cinco minutos suplementarios, luego de empatar en 77.
“Pepe”, como el zorro, “pierde el pelo pero no las mañas”, ya que en esa casi media hora en cancha se lució en una de sus especialidades, las asistencias, al entregar ocho, además de convertir 12 puntos (2-3 en dobles, 2-8 en triples y 2-2 en libres).
Bahía Basket presentó solamente nueve jugadores (el mínimo requerido es ocho), ya que tiene a seis componentes del plantel con coronavirus, que son Valentín Forestier, Ezequiel Paz, Facundo Tolosa, Valentín Simondi, Gabriel Novaes, y Tiziano Prome.