El Ministerio de Seguridad implementó el “Protocolo para la Prevención y Abordaje de las Violencias” en las fuerzas policial y penitenciaria.
La iniciativa comenzó a elaborarse a mediados de 2021 y fue aprobada el pasado 15 de noviembre. Contó con el trabajo del subsecretario de Relaciones Institucionales, Néstor Majul, y de la coordinadora a cargo, la subcomisaria y licenciada del área de Asistencia al Policía Cecilia Zambrano.
El protocolo tiene los objetivos de erradicar los hechos de violencia en general o de género, actos discriminatorios y la revictimización del personal que sufre una situación de grave estrés.
Entre las situaciones de violencia de género y otros tipos que integran, se detallan: intrafamiliar, laboral, violencia institucional, que pueden tener a un policía o penitenciario como víctima y un potencial victimario ajeno o a la inversa.
En ese sentido, la subcomisaria Cecilia Zambrano manifestó que “es urgente transformar a las fuerzas de seguridad y armadas para desconstruir formas autoritarias, garantizar derechos humanos y una vida libre de violencia“, precisó.
En cuanto al abordaje, incluye seis anexos, con obligaciones, indicaciones y procedimientos. En ellos, hay parámetros específicos que los funcionarios deberán atender vinculados con la toma de conocimiento, al trato a la víctima, las cualidades del agresor, las medidas para la protección psicológica y física y la prevención de hechos futuros.
A la vez, el asesoramiento estará a cargo de diferentes organismos, como el Programa de Protección Integral al Policía, la Unidad de Mujeres y Disidencias, en casos de violencia de género, o la Defensoría del Personal Penitenciario, para otros hechos.
