Hace exactamente un año, con tan solo 9 años de edad, se detectó en la paciente un tumor maligno en la cabeza del páncreas. En ese momento y para determinar la malignidad del tumor, se utilizó una técnica mínimamente invasiva, una biopsia realizada por ecoendoscopia. El procedimiento no está descripto ni publicado en el país en un paciente pediátrico y estuvo a cargo del doctor Jorge Isaguirre.
La intervención también requirió de la experiencia quirúrgica en adultos del doctor Jorge Bufaliza, experto en cirugía pancreática, marcando otro hito: se realizó la primera duodeno-pancreatectomía en un paciente de edad pediátrica en Mendoza. Es una operación que involucra al páncreas, al duodeno y a otros órganos. El procedimiento fue efectivo y la paciente no requirió de quimioterapia.
Sin embargo, “como consecuencia de sus diminutas dimensiones pediátricas, hace tres meses comenzó a presentar pancreatitis a repetición y requirió internación. Se le diagnosticó estenosis del conducto de Wirsung, que es la estrechez del conducto principal del páncreas en la unión con el intestino. Esa estrechez es causa de pancreatitis. Este es el conducto principal del páncreas que permite drenar el jugo pancreático al intestino”, explica Humberto Scherl, jefe del Servicio de Cirugía Infantil.
Para su resolución, era necesaria una nueva intervención quirúrgica, que implicaba una reconstrucción de la cirugía efectuada anteriormente. Por ello, varios profesionales se reunieron para decidir conjuntamente la implementación de una nueva técnica innovadora a nivel país, denominada laparoendoscopia con colocación de un stent pancreático, a fin de resolver esta complicación y evitar de esa manera una intervención sumamente invasiva.
La niña permaneció internada el Servicio de Internación Pediátrica 4, a cargo del doctor Daniel Meoño, a fin de estabilizarla y prepararla para la intervención quirúrgica descripta.
Con la aplicación de esta combinación de técnicas, endoscópica y laparoscópica, de forma simultánea, se logró erradicar el tumor pancreático. El resultado fue una muy buena evolución y resolución de los parámetros de laboratorio indicadores de alteración pancreática. Actualmente, a semanas de la cirugía, la niña se ha reintegrado al colegio y a su actividad física habitual.
El procedimiento requirió de la participación de varios médicos y el equipo completo del Servicio de Cirugía del Hospital Notti. Además, de los servicios de Gastroenterología, Oncología, Clínica Pediátrica, Laboratorio, Endocrinología, Diagnóstico por Imágenes y Nutrición Clínica.