Marcelina Sena, hermana de Emerenciano, uno de los principales apuntados por el presunto femicidio de Cecilia Strzyzowski en Chaco, quedó en el centro de la escena.
Resulta que la mujer ayer fue a visitar a su hermano a la comisaría 3° de Resistencia, con la excusa de darle los medicamentos que él precisa para la diabetes.
En momentos que la mujer estaba en la dependencia, los agentes observaron que Marcelina Sena sacó dos hojas y se las dio a Emerenciano. Fue ahí cuando los uniformados intervinieron y se las sacaron. Se trataba de dos cartas que ella le había escrito a su familiar.
Y si bien no trascendió el contenido completo de las misivas, se supo que ella le daba órdenes a su hermano sobre cómo sobrellevar la estrategia legal, y le pidió que “haga callar” a su esposa, Marcela Acuña.
Pero esto no es todo. En otras de las líneas, le llevó tranquildada a Sena y le aclaró que estaba “todo arreglado con un juez de garantias”.
“(Ricardo) Osuna tiene todo bajo control”, leyeron las autoridades en una de las cartas que Marcelina le dio a su hermano, en referencia a quien hoy es el abogado de César Sena, el hijo del matrimonio.
Además, le sugirió que designen a Ricardo Osuna como el defensor del matrimonio. “Si querés, podés cambiar de defensor, pero tenés que pedírselo a la fiscalía”, le advirtieron.
Otro de los mensajes que no pasó desapercibido, es que logre avanzar con la diabetes que lo tiene a maltraer en prisión. “Me dijo que empieces a hacer show. Que te hagas bajar el azúcar así apuramos tu domiciliaria”, agregó Marcelina.
Mañana, Emerenciano Sena será sometido a un estudio para analizar sus niveles de azúcar y así evaluar una posible prisión domiciliaria. En otro pasaje de la carta, su hermana le aconsejó consumir azúcar para que los niveles sean altos y pueda regresar a su casa.
Lo que buscan los padres de César es intentar esquivar la acusación de homicidio y acceder a un eventual encubrimiento que no pueda llevar a consecuncias legales, debido a que el código penal exime el encubrimiento en el lazo de padre e hijo.
“Ellos no tienen nada, están esperando el resultado del ADN. No conviene ningún tipo de declaración, salvo que llegara a dar positivo. Necesitamos que Marcela no declare porque sino se hunden los tres”, es uno de los mensajes claves de la carta.