Este martes, más de uno se sorprenderá al ver una columna del juez de la Suprema Corte de Justicia, Mario Adaro, en diario Ámbito Financiero.
Allí, bajo título “Mercado paneuropeo de datos o Internet B”, el magistrado se refiere a las recientes demandas contra Facebook y Google y “se replantea el debate sobre el uso y la explotación de los datos”.
Allí, Adaro refiere a la aparición de Solid, una alternativa a internet: “Se trata de un servidor con almacenamiento descentralizado en el que ya el ministerio de salud británico -NHS, por su nombre en inglés- y la BBC almacenan su información. El nuevo paradigma que vincula la confianza entre usuarios, empresas de información y privacidad de datos”.
Y explica: “El modelo Solid ofrece a cada usuario final su propio espacio descentralizado de almacenamiento de información (POD, por Personal Online Data). Son, digamos, baúles cerrados a los que solo el dueño de la información puede acceder y brindar acceso. Así, la empresa que trabaja con Solid y perfila usuarios en base a sus datos, como la BBC, le pide al público que abra ese baúl y permita acceder a determinados datos, a los efectos de ofrecer una mejor experiencia de usuario: contenido relevante, etcétera”.
Acto seguido, el juez cuenta un caso local: “Pero por estos días la Corte Suprema de Justicia de Mendoza comenzó tratativas con Inrupt para analizar en conjunto qué información del tribunal podría ser administrada por Solid. Desde luego, se trata de un primer avance con carácter de exploración, dado que hasta el momento ningún otro órgano judicial del mundo se pensó a sí mismo como un almacenador de información que pertenece a los ciudadanos”.
Luego, Adaro puntualiza: “Sin embargo, desde ya resulta auspicioso el carácter innovador de la iniciativa, en la medida en que supone repensar la relación entre la persona humana y la tecnología web. En ese sentido, los avances en la digitalización de la Corte mendocina tienen como parámetro poner a quienes son parte de procesos judiciales en el centro de las consideraciones, bajo el paradigma de los nuevos derechos digitales”.
Entonces, el magistrado revela que en el máximo tribunal citado “planean comenzar a incorporar información de las causas de violencia de género a Solid. Esto permitiría una prueba piloto tendiente a cerrar el ciclo de la violencia en un abordaje integral, que hoy no se tiene”.
Así lo justifica: “Frente al sistema tradicional de causas y expedientes, en el que cada nueva denuncia se convierte en una gestión distinta sin poder integrar los problemas bajo un mismo nombre y dentro de la misma vida, en la Corte analizan cómo podría vincularse toda la información judicial de una persona si los datos estuvieran en su propio POD”.
¿Una gran pegada o un gran negocio? Imposible saberlo aún.