Esta semana que está iniciando no será una más para el Gobierno de Rodolfo Suarez. Esta previsto que en los próximos días vuelva a darse un encuentro paritario entre los representantes del Ejecutivo provincial y los referentes de la Asociación de Trabajadores de Estado (ATE).
En el sindicato que tiene al frente a Roberto Macho y a Adriana Iranzo, ya hablan de posibles “medidas de fuerza”, en caso que no lleguen a un entendimiento con el Gobierno durante los días venideros.
El pasado jueves, en la reunión que protagonizaron ambas partes, los enviados de Suarez no contemplaron varios perdidos del gremio, entre los que destacaron “un aumento salarial al básico de revista, igual o superior a los índices inflacionarios; reivindicaciones laborales en los adicionales específicos, tanto para el Régimen 15 y 05, como para los demás regímenes salariales que representamos mayoritariamente en el resto de las paritarias provinciales; reconocimiento de Licenciados en Enfermería, junto con el pago de los respectivos retroactivos; y pases a planta de trabajadores contratados y prestadores”.
Al fracasar la negociación, el secretario General de ATE, Roberto Macho, explicó: “Recibimos una propuesta salarial del Gobierno, que no contiene lo planteado por los trabajadores en las distintas asambleas“.
Y dijo que el ofrecimiento de Suarez y los suyos no es equitativo, “en cuanto lo que han dispuesto para otros sindicatos, y que incluye un aumento salarial del 71% pelado, sin tener presente un aumento para compañeros contratados y prestadores, más un cronograma de pases a planta de los mismos; fecha de cambio de régimen de Licenciados en Enfermería (Anexo III); mayor dedicación para compañeros con cargos de planta y contrato o prestación; y reconocimiento de la antigüedad de los trabajadores, entre otras reivindicaciones puntuales”.
De este modo, el Gobierno solicitó un cuarto intermedio hasta esta semana, con el objetivo de llegar a un entendimiento con uno de los gremios más importantes de la provincia.
“ATE no se va a arrodillar frente a ningún gobierno. Quieren cercenar nuestros derechos a protestar en las calles y a tener mejores condiciones laborales y salariales. Nos usan para otorgar beneficios a un grupo de elite. Nosotros no vamos a discriminar a ningún trabajador, sea del sector que sea que representemos. Vamos a luchar por los derechos que nos corresponden como clase trabajadora”, enfatizó Adriana Iranzo, secretaria adjunta del gremio.
Por su parte, Macho agregó: “Vamos a participar de las reuniones técnicas y vamos a agotar hasta las ultimas instancias de negociación colectiva que estén a nuestro alcance como sindicato. Mientras, trabajadores de todos los ámbitos estatales vamos a concéntranos en el lugar donde se desarrollen las paritarias, porque allí tendremos que votar si aceptamos o rechazamos la propuesta. En caso de rechazo, deberemos decidir también las medidas de acción directa a seguir”.