Un aberrante hecho ocurrió durante la tarde del martes en la Ruta Provincial 28 de Salta. Resulta que un ciclista, que transitaba por la mencionada arteria, fue rociado con combustible y luego incendiado. Falleció posteriormente.
Un automovilista que transitaba por el camino, observó a una persona inconsciente, con quemaduras en todo su cuerpo, y a pocos metros una bicicleta.
Inmediatamente, el hombre avisó a la Policía, cuyo puesto estaba a tan sólo cuatro kilómetros del lugar, en donde fue encontrada la víctima.
Al llegar al lugar, los efectivos trasladaron al hombre herido hasta el hospital San Bernardo, pero murió a los pocos minutos antes de arribar al hospital San Bernardo.
Unas horas después se supo que la víctima se llamaba Ramiro Esteban Sagasta, tenía 44 años, y solía usar ese trayecto de la ruta para practicar ciclismo, una de sus actividades favoritas.
De acuerdo a la declaración de un testigo, el hombre fue prendido fuego por otras personas. En sus dichos, afirmó: “Vi como desde una motocicleta le arrojaron un líquido y a los pocos segundos comenzó a arder”.
De acuerdo a la autopsia, el ciclista tenía quemaduras en la espalda, la cabeza y los brazos. Falleció por un paro cardiorrespiratorio causado por las gravísimas heridas. Ahora intentan determinar si efectivamente era nafta lo que le tiraron para después prenderlo fuego.
Según la reconstrucción que realizó la Policía provincial, Sagasta salió temprano desde su casa para entrenar. Horas después, fue encontrado al costado de la ruta, completamente quemado. Su bicicleta había quedado a pocos metros, junto a un alambrado. En medio de una crisis de nervios, la esposa del ciclista debió reconocer el rodado. A pocos metros, los investigadores encontraron un bidón y una caja de fósforos.
Desde que ocurrió el hecho, la Fiscalía dispuso una serie de medidas para esclarecer la muerte del hombre de 44 años. Por eso, la fiscal Verónica Simesen de Bielke estuvo en el lugar para seguir de cerca cada punto de la investigación.
En un principio, los sabuesos habían creído que se trataba de accidente de tránsito. Algo que fue descartado enseguida.
Mucho más con la declaración de un testigo, que afirmó que al ciclista le tiraron un “líquido” desde una moto y después vio cómo se incendiaba todo su cuerpo. En tal sentido, una de las hipótesis asegura que podría tratarse de un intento de robo por parte de motochorros y como Sagasta se resistió, lo rociaron con combustible y lo prendieron fuego.
“Las hipótesis son muchas y no se puede descartar ninguna hasta que haya una línea investigativa. Pero la hipótesis del robo no está firme porque se encontraron la bicicleta y el casco de la víctima que son de alto valor”, explicó la fiscal.
Y agregó: “La de ajuste de cuentas también se tiene en cuenta. Tenemos que ser muy prudentes con la información que damos, nos sirven mucho los testimonios de amigos y familiares, que pueden dar cuenta si la víctima fue amenazada o presentaba algún problema con alguien”.