Al menos 67 muertos en Gaza y seis en Israel es el nuevo saldo del intercambio de hostilidades entre el grupo que defiende la causa palestina Hamas y las fuerzas israelíes. Los ataques aéreos en Gaza y el lanzamiento de cohetes contra Tel Aviv representan las hostilidades más intensas de la región en años. La comunidad internacional llama a cesar los enfrentamientos para evitar un conflicto mayor, mientras el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu amenaza con más ataques.
Pero mientras esta tragedia transcurre, según fuentes diplomáticas, la reunión de emergencia entre 15 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU terminó sin una declaración final debido a la oposición de los Estados Unidos.
Al menos 67 personas, incluidos 16 menores de edad, han muerto en Gaza desde que la violencia se intensificó el 10 de mayo, según confirmó el Ministerio de Salud del enclave este miércoles. Además, seis personas murieron en Israel tras el masivo lanzamiento de cohetes por parte de Hamas, adelantaron funcionarios médicos en terreno.
Israel realizó decenas de ataques aéreos en Gaza hasta este miércoles por la mañana, luego de que el grupo islamista y otros militantes palestinos dispararan centenares de cohetes contra Tel Aviv y la ciudad sureña de Beer Sheva.
En la ciudad israelí de Lod (Israel-centro), varios automóviles quemados y una casa dañada dan testimonio silencioso donde un hombre de 52 años y su hija de 16 murieron cuando un cohete cayó en el patio de su casa. Las brigadas Al Qasam, ala armada del movimiento islamista Hamas, lanzaron esta mañana un misil anti-tanque que causó un muerto y dos heridos, confirmó el Ejército. La víctima murió tiempo después por las heridas, según medios locales, lo que eleva la cifra de muertos en Israel a seis.
Este miércoles los judíos retiraron los rollos de la Torá de una sinagoga incendiada tras estallar la violencia en ciudades mixtas árabe-judías en Israel, producto de los ataques aéreos israelíes en Gaza y los enfrentamientos en Jerusalén.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, le dijo este miércoles a la prensa que había hablado telefónicamente con Benjamin “‘Bibi’ Netanyahu”, como le dicen al primer ministro israelí sus seguidores.
Biden explicó que su personal de seguridad nacional y de defensa ya conversó con los gobiernos de Egipto, Arabia Saudita, Emiratos Árabes, Israel y con las autoridades de Palestina. Según el presidente, tiene la esperanza en que los ataques cesen pronto.
Acto seguido, Biden reiteró la postura que ya se había conocido del Gobierno norteamericano.
“Israel tiene derecho a defenderse cuando hay miles de misiles volando hacia su territorio”, aseguró el mandatario estadounidense. Posteriormente, en un comunicado de prensa, Biden condenó los ataques con cohetes por parte de Hamas y no se refirió a los ataques aéreos que ha ejecutado Israel contra la Franja de Gaza.
Antes de la llamada con Biden, el primer ministro Netanyahu ya había mostrado su postura de continuar los ataques.
Israel dijo este miércoles que mató a 16 miembros de Hamas en Gaza tras un bombardeo.
Netanyahu precisó que el comandante de la brigada de la ciudad de Gaza se encontraba entre los miembros de alto rango del grupo militante islamista que había sido asesinado.
“Esto es solo el comienzo. Los golpearemos como nunca hubieran soñado que fuera posible”, dijo el político.
El presidente palestino, Mahmud Abbas, se reunió con altos funcionarios de la Organización de Liberación de Palestina en la ciudad cisjordana de Ramallah para discutir la escalada del conflicto.
Desde allí, le dijo a la prensa que Jerusalén es una “línea roja” y el “corazón y el alma” de los territorios palestinos
. “No hay paz, seguridad ni estabilidad sin la liberación completa de Jerusalén y su regreso a su pueblo palestino y a su nación árabe e islámica. Jerusalén es la capital del eterno estado de Palestina”, apuntó Abbas.
Además, se dirigió específicamente a Israel y a los Estados Unidos, a los que les dijo: “Ya es suficiente, déjennos. Seguiremos siendo espinas en sus ojos, no dejaremos nuestra patria, no dejaremos nuestro país. Acaben hoy y no mañana con su ocupación de nuestra tierra”.
Hamas confirmó la muerte del comandante de Gaza, Bassem Issa, y de “otros líderes y guerreros santos” en un comunicado.
Su líder Ismail Haniyeh agregó: “El enfrentamiento con el enemigo es indefinido”.
Fuentes le aseguraron a Reuters que son por lo menos 10 los militares de alto rango del grupo que han muerto en los ataques.
Y es que los bombardeos masivos en la Franja de Gaza, por parte de Israel, continuaron este miércoles y con ellos han destruido al menos tres torres.
Uno de ellos era un edificio residencial de más de 10 pisos y otra era una torre que según los israelíes albergaba a Hamas.
También han sido destruidos medios de comunicación, mientras que otra estructura resultó gravemente dañada por los ataques aéreos.
El Ejército de Israel asegura que son sitios de lanzamiento de cohetes, oficinas de Hamas y hogares de líderes del grupo; aunque varios civiles han muerto al punto que el Comité Internacional de la Cruz Roja recordó este miércoles que no se pueden atacar ni a los civiles ni a sus bienes.
“Israel se ha vuelto loco”, dijo un residente en una calle de Gaza, donde la gente salió corriendo de sus hogares cuando las explosiones sacudieron los edificios.
Minutos después del bombardeo de Israel, Hamas lanzó una nueva ofensiva de cohetes contra la ciudad israelí de Ashdod, mientras los medios israelíes afirmaban que el Ejército se estaba preparando para nuevas ráfagas en el área de Tel Aviv.
Una fuente palestina dijo que los esfuerzos de tregua de Egipto, Qatar y las Naciones Unidas no habían logrado ningún progreso para poner fin a la violencia, que estalló esta semana después de la tensión durante el mes de ayuno musulmán del Ramadán y los enfrentamientos en Jerusalén Este.
Antony Blinken, el secretario de Estado de los Estados Unidos, describió las imágenes como “desgarradoras” y dijo que se enviaría a Hady Amr, un asistente de alto nivel, para instar a israelíes y palestinos a buscar la calma.
La corporación energética estadounidense Chevron anunció el cierre de la plataforma de gas natural Tamar, ubicada frente a la costa israelí, siguiendo las instrucciones del Ministerio de Energía. Israel asegura que se seguirán satisfaciendo sus necesidades energéticas. Israel ha enviado infantería y blindados para reforzar los tanques ya reunidos en la frontera, evocando recuerdos de su última incursión terrestre en Gaza para detener los ataques con cohetes en 2014.
Netanyahu decretó el estado de emergencia en Lod, cerca de Tel Aviv, luego de informes de que miembros de la minoría árabe (21%) de Israel habían incendiado sinagogas y que los judíos habían apedreado automóviles conducidos por residentes árabes.
“Hemos perdido el control de la ciudad y las calles”, declaró Yair Revivo, el alcalde de Lod a los medios locales, después de varias noches de enfrentamientos violentos en los que un ciudadano árabe murió y muchos resultaron heridos. La Policía arrestó a decenas de personas durante la noche en Lod y en ciudades de mayoría árabe en el centro y norte de Israel, incluida Umm al-Fahm a lo largo de la frontera de Cisjordania y Jisr al-Zarqa en la costa mediterránea.
“Condenamos que la solidaridad y la cohesión de nuestro pueblo con nuestros hermanos en Jerusalén y la Franja de Gaza se canalice a través de actos de sabotaje a la propiedad pública y privada como está sucediendo ahora en la entrada de Umm al-Fahm”, dijo Samir Mahamid, alcalde de Umm. al-Fahm.
Con equipaje, documentos personales y objetos de valor, los residentes de Gaza se alejaron de la estructura dañada de algunos apartamentos, donde un ataque aéreo destruyó parte del edificio antes evacuado y que según dijeron las fuerzas israelíes, eran utilizados por el Ministerio del Interior, dirigido por el grupo militante Hamas en Gaza.
“Israel está bombardeando a civiles en sus hogares porque no pueden enfrentarse a los hombres de la resistencia. Somos objetivos más fáciles para ellos”, dijo una mujer, que se identificó sólo como Umm Hassan.