Finalmente, las farmacias de Mendoza no podrán vender el test rápido para Covid-19 Inmunobio. Solamente podrán comercializarse en droguerías, y a profesionales de laboratorios de análisis clínicos.
La novedad la dio a conocer la dirección de Farmacología de la provincia.
La determinación oficial trascendió el pasado 3 de mayo, y la circular fue firmada por la responsable de la Dirección de Farmacología, Cecilia Orueta, que estableció que las droguerías tipo A y B son las únicas que tienen permitido vender el test rápido Inmunobio a los laboratorios mencionados.
El titular del Colegio Farmacéutico de Mendoza, Mario Valestra, dijo a Unidiversidad que con esta decisión, Mendoza pierde la posibilidad de utilizar un insumo muy importante para incrementar la cantidad de testeos. A pesar de esta situación, señaló que acatarán la decisión del Ministerio de Salud.
Valestra explicó que este tipo de test es utilizado en todo el mundo para aumentar la cantidad de muestreos, y que con el seguimiento adecuado sería una herramienta muy importante, especialmente en este momento crucial para Argentina, que enfrenta la segunda ola de la pandemia.
Además, puso el ejemplo de España, donde estos productos son de venta libre y los realizan distintos profesionales, incluso los farmacéuticos.
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó la venta libre, pero de uso exclusivo de un profesional, el test rápido Sars-CoV-2 Inmunobio, elaborado por Hangzhou Inmuno Biotech Co Ltd. Es decir que podía adquirirlo cualquier persona en una farmacia, pero lo tenía que realizar un profesional.
Este test de origen chino permite conocer el resultado de la prueba para coronavirus en 10 minutos, con un nivel de eficacia de 96,8 %.
Tras la aprobación de Anmat, las autoridades de la Asociación Bioquímica Mendoza elevaron por medio de una nota a la ministra de Salud, Ana María Nadal, solicitando la prohibición de la venta en farmacias, asegurando que esto representaba un peligro para la comunidad.
En aquel entonces, el titular de la entidad, Gustavo Yapur explicó los dos peligros básicos por lo que solicitaron la prohibición de venta en farmacias. El primero fue que si al test no lo realiza un profesional podría generaran falsos negativos, ya que este dispositivo busca una proteína del virus que sólo aparece en un tiempo acotado. El segundo, fue que aun si diera positivo, nadie cargaría ese nuevo caso al Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentino (SISA), una exigencia para cualquier profesional de la salud.