Diariamente News Online refleja mejoras, tareas de mantenimiento y diferentes tipos de roturas con las que tiene lidiar la empresa Aguas Mendocinas, como así tambien los vecinos de distintas zonas que se ven afectados por estas situaciones de nunca acabar.
Una de esas llamativas y vergonzosas situaciones se da sobre calle Estada en Guaymallén, sobre todo en el sector comprendido entre Adolfo Calle y lateral sur del Acceso Este.
En esta zona, el pasado 14 de abril “se cortó el tránsito en la Calle Estrada desde Adolfo Calle a lateral Acceso Este”, contó Pablo Godoy, dueño de un reconocido lubricentro.
Resulta que en este sector, Aguas Mendocinas comenzó con una importante obra cloacal, lo que llevó a los operarios de la firma a tener que destruir la carpeta asfáltica, a fin de avanzar con las tareas.
El tema es que los días pasaron, las semanas y los meses tambien, hasta que los vecinos dijeron “basta” y comenzaron a juntar firmas para expresar el descontento que esta situación les ha generado.
“El tránsito es caótico y prácticamente imposible en horarios picos, más aún con calle Estrada cortada, que es el cruce por el que se accede al Acceso Este desde los barrios 1°, 2° y 3° Unimev, las torres de la barriada, Cadore, UTMA, Tonada, Cogollos, Club de Campo, y otros más“, continuó diciendo Godoy a quien escribe estas líneas.
Si bien la interrupción del tránsito, como así también el haber dejado la obra a medias generó el malestar antes mencionado, hay otro hecho por demás irritante, y es que de un momento a otro, los empleados cortaron la calle Estada, desde Adolfo Calle hacia el sur, sector en el que por ahora hay escasos avances.
“Comenzaron los cortes y roturas desde el mes de febrero, vivir en esta zona es un martirio, hemos tenido cortes completos de calle Semorille dos dias, al igual que Magallanes”, se lee en una carta firmada por los vecinos, quienes hartos de esta situación, enviaron la misiva a la comuna y a Aguas Mendocinas.
En el escrito, además de pedir “empatia” y de entender la importancia de la obra para la zona, se quejan por qué “trabajan y no trabajan, no se sabe cuando trabajan”, y “continúan las calles cortadas, sucias, regando con un camión desde lateral Acceso Este por Estrada hacia casi Adolfo Calle“, añadieron.
Aseguran haber vivido “cosas inauditas”, y precisaron que un vecino debió comunicarse con una línea de asistencia por un problema de salud, y cuando los galenos llegaron hasta la zona “no sabían como entrar”.
La insólita e interminable obra, tal cual reza el título de este artículo, también ha llevado a poner contra las cuerdas a una gran cantidad de comercios, los que además de tener que luchar a diario con una economía devastada, se ven desbordados por esta situación.
“No quiero pensar si desde el lado sur del acceso alguien tiene una indisposición médica y debe concurrir al Hospital Notti, a lo mejor habrá que lamentar después una desgracia“, concluyeron.
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