Con las fiestas de fin de año a la vuelta de la esquina, en el Gobierno provincial buscan darle un cierre cuanto antes a las negociaciones paritarias con los gremios estatales.
De hecho, en Casa de Gobierno ya han informado aumentos por encima del 90%, lo que ha ubicado a algunos estatales mendocinos en un lugar de privilegio, si se comparan con algunos privados.
Si bien estos acuerdos implicaran que la provincia desembolse una cantidad superior a los 20 mil millones de pesos solamente en salarios, en Casa de Gobierno solo quieren tener un fin de año en paz.
Cabe recordar que meses atrás, el Ejecutivo se había mostrado inflexible y le puso fin a las paritaria. Sin embargo, las manifestaciones que se dieron a mitad de año y la insostenible inflación, hicieron que a la administración provincial no le quedara más alternativa que volver a abrir las negociaciones.
Tal cual reza el título de este artículo, en el Gobierno no quieren ningún tipo de sobresalto. De hecho, Suarez no quiere comprometerse con proyectos que puedan generarle dolores de cabeza o que puedan motivar algún tipo de caos en las calles.
Proyectos como la reforma de la Corte y el Presupuesto son dos de los temas que en su momento hicieron ruido. Ese momento de zozobra pasó y en Casa de Gobierno respiran tranquilos.
Es más, en los próximos días se tratará el Presupuesto en el Senado, por lo que Suarez tendrá su bendita pauta de gastos para el año que viene, incluyendo la famosa deuda para obras y gastos por más de un billón de pesos.
Otro tema que quedará para más adelante, y vaya a saber a quién le toca lidiar con él, es el famoso proyecto de reforma de la Ley 7722.
Como se dijo anteriormente, Rodolfo Suarez quiere un cierre de años sin problemas para poder brindar en paz.
