Una familia mendocina promedio necesitó más de $230.000 para no ser catalogada como pobre. Esta medición corresponde al mes de julio según informó este jueves la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económica (DEIE).
La Canasta Básica Total (CBT) que equivale al conjunto de bienes que satisfacen las necesidades nutricionales de las personas, teniendo en cuenta los hábitos de consumo de una población determinada, aumentó $14.619 respecto a la última medición.
VER: Cuánto necesitó una familia mendocina en mayo para no ser pobre
De esta forma, los hogares mendocinos que cuenten con un ingreso menor a $232.078, se consideran pobres.
Por su parte, la Canasta Básica de Alimentos (CBA) atribuida a el conjunto de bienes y servicios que satisfacen las necesidades comunes de la población, teniendo en cuenta los hábitos de consumo de una población, sufrió un incremento respecto al mes de junio. El mismo fue de $5546.
Así, una familia mendocino necesitó contar por lo menos con $93.958 para no ser considerados pobres extremos o indigentes.