La Corte Suprema de Estados Unidos postergó este miércoles por 48 horas su definición sobre el acceso a la píldora abortiva en el país, mientras sigue adelante una demanda para prohibirla del todo, lo que en los hechos implica que hasta este viernes el medicamento podrá ser adquirido en farmacias, con receta médica.
El máximo tribunal indicó en un escueto comunicado que prorrogaba 48 horas su suspensión de la decisión de un tribunal inferior sobre la píldora, hasta las “23H59 del viernes 21 de abril”, informó la agencia de noticias AFP.
El caso, toda una saga legal, se originó por una demanda presentada ante tribunales del sureño estado de Texas para revertir la aprobación de la mifepristona por parte de la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) de Estados Unidos.
Un juez de primera instancia prohibió en la práctica el uso del medicamento, pero una corte de apelaciones modificó el fallo y permitió que el medicamento se siguiera utilizando, pero con límites que son rechazados por el Gobierno, su fabricante y grupos proaborto.
El fármaco obtuvo la aprobación de la FDA por primera vez en 2000, y las condiciones de su uso se han flexibilizado en los últimos años, incluida la disponibilidad por correo en los estados que permiten el acceso.
El Gobierno del presidente Joe Biden y Danco Laboratories, el fabricante de la droga, quieren que la Corte Suprema rechace los límites al uso de la mifepristona impuestos por los tribunales inferiores, al menos mientras el caso legal se resuelve en esos tribunales.
La Corte Suprema, que tiene una mayoría conservadora de 6-3, podría decidir el restablecimiento de las restricciones instauradas a nivel de apelación, la prohibición total o alguna otra configuración.
El Gobierno demócrata y el laboratorio dicen que las mujeres que quieren el medicamento y los proveedores que lo dispensan se enfrentarán a un caos si los límites del medicamento entran en vigor.
Además, hay temores de que estas demandas allanen el camino para que los tribunales impugnen otros medicamentos.
“No es exagerado decir que un juez puede levantarse por la mañana y decidir que quiere retirar del mercado un determinado medicamento”, incluidas vacunas o antidepresivos, dijo hoy Josh Sharfstein, ex comisionado adjunto principal de la FDA, a la cadena ABC.