La Dirección General de Escuelas (DGE) y la Asociación Mendocina de Expendedores de Naftas y Afines (Amena) firmaron un convenio para brindar una alternativa de terminalidad educativa.
El programa es flexible, con horarios adaptados y centros educativos designados para consultas. Hasta el momento hay 223 inscriptos de toda la provincia.
“Es un ejemplo de cómo trabajar de forma colaborativa por el derecho a la educación, también es un gran paso que estamos dando. Este programa abre una puerta y tenemos grandes expectativas también para el año que viene”, afirmó el titular de Escuelas, José Thomas.
Por su parte, el presidente de Amena, Isabelino Rodríguez, ponderó el trabajo realizado: “Desde la asociación buscamos que los empleados tengan la oportunidad de terminar los ciclos primario o secundario. Consideramos importante que todos los trabajadores de las estaciones de servicio puedan tener el derecho a educarse y buscar mayor inclusión social“, concluyó.
Datos sobre la experiencia educativa
Como resultado de este trabajo, 223 personas se inscribieron para comenzar los programas con un fuerte acompañamiento desde sus trabajos y flexibilidad horaria.
El 85% de los inscriptos comienza con el programa para terminar el secundario, mientras que 15% tendrá la posibilidad de culminar la primaria.
La modalidad de estudios será principalmente virtual, lo que dará la posibilidad de manejar los tiempos e ir avanzando a medida que se completen objetivos.
De las 95 personas que ya están estudiando, 38 adeudan menos de cinco materias para obtener el certificado de escolaridad completa. Nueve de ellas son de colegios técnicos y se espera que todas puedan cumplir el sueño de tener sus analíticos de secundaria a finales de 2022 o principios de 2023.
