Tras haber recaudado más de $1300 millones por datos de entre 2016 y 2017, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) investiga 1800 casos de cuentas financieras de argentinos en el exterior referidos a 2018.
“Los datos utilizados por el organismo que encabeza Mercedes Marcó del Pont para cobrar impuestos evadidos a empresas e individuos que ocultaron sus colocaciones o incurrieron en errores a la hora de declararlo provienen de más de 90 países que comparten sus registros en forma automática como parte de un mecanismo global de intercambio de información sobre colocaciones bancarias extranjeras“, informan desde AFIP en referencia al Acuerdo Multilateral de Autoridades Competentes para el intercambio automático de información sobre colocaciones bancarias extranjeras que se firmó en 2014.
Con los datos recibidos, al momento de avanzar con la fiscalización, la AFIP identifica cuatro grupos de riesgo de contribuyentes:
- Declaran una cuenta en el exterior pero el monto reportado es inferior al que figura en la información recibida del exterior. No declararon colocaciones financieras en el exterior en sus presentaciones de Bienes Personales.
- No presentaron una declaración jurada de Bienes Personales.
- No están inscriptos.
“La mayor parte de los casos que terminan en un ajuste de impuestos consisten en contribuyentes que, habiendo presentado su declaración jurada de Bienes Personales, evitaron reportar una cuenta a su nombre en otro país”, aclaran desde el organismo.
“Una omisión extendida entre ese universo son, por ejemplo, las cuentas no declaradas en jurisdicciones europeas reconocidas por su elevado nivel de opacidad que, sin embargo, participan del intercambio de información de cuentas financieras y envía a la AFIP de manera automática la información obrante en sus bancos sobre los residentes argentinos”, explican.
De acuerdo con un informe interno del organismo que dirige Mercedes Marcó del Pont, en los últimos dos años el ente recaudador analizó más de 2400 casos referidos a los períodos fiscales 2016 y 2017. En ellos identificaron irregularidades en unos 700 casos, que los llevó a establecer ajustes por $1300 millones en impuestos evadidos. Este año, el organismo comenzó a fiscalizar y explotar los datos de 2018, donde pusieron el foco en otros 1800 argentinos.
Fuente: Ámbito