El próximo 23 de octubre, Argentina recibirá la visita del magnate sudafricano Elon Musk, fundador de Tesla y SpaceX, en un evento que tendrá lugar en el ex Centro Cultural Kirchner, el histórico Palacio del Correo Central.
La llegada es vista como un fuerte guiño de apoyo al presidente argentino, Javier Milei, quien busca consolidar alianzas internacionales y atraer inversiones clave para impulsar su ambiciosa agenda de reformas económicas.
VER: Reveladora encuesta: la opinión de los mendocinos sobre la gestión de Milei
Antes de este anuncio, Elon Musk y Javier Milei ya habían mantenido una reunión clave en Nueva York, en el marco de la gira del presidente argentino para su presentación ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
En dicho encuentro, que duró aproximadamente una hora, ambos discutieron sobre el panorama económico de Argentina y las oportunidades que el país presenta en el mercado internacional, particularmente en sectores estratégicos como la tecnología y la energía.
Musk, conocido por su interés en mercados emergentes y en la innovación tecnológica, mostró especial curiosidad por el enfoque del gobierno argentino para enfrentar la crisis inflacionaria que sacudía al país.
En este sentido, el magnate sudafricano destacó lo que denominó el “milagro inflacionario” de Argentina, refiriéndose a la forma en que el gobierno de Milei logró desacelerar la inflación tras varios meses de políticas fiscales y monetarias estrictas, evitando una temida hiperinflación.
El interés de Musk por el litio argentino
Uno de los principales intereses de Elon Musk en Argentina es el litio, un recurso esencial para la fabricación de baterías, elemento central en el desarrollo de vehículos eléctricos como los que produce Tesla.
Para Musk, garantizar un suministro estable de litio es clave para el crecimiento de su empresa, y Argentina, con su vasto potencial minero, se presenta como una fuente estratégica para asegurar este insumo crítico.
Durante su visita, se espera que Musk explore posibles acuerdos de inversión en el sector minero y energético, lo que podría impulsar el desarrollo de infraestructuras y la creación de empleos, además de atraer más capital extranjero al país.