Un fiscal imputó esta noche por el delito de homicidio agravado por alevosía y por transversalidad al ex cuñado de la joven de 20 años que fue asesinada ayer a puñaladas en una casa de la localidad mendocina de Rivadavia, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Hugo Sosa (41), quien fue imputado del delito de “homicidio agravado por alevosía y por transversalidad”, es decir, por matar a un tercero con el objeto de provocar sufrimiento a su pareja o expareja, figura conocida como femicidio vinculado, indicaron los voceros.
Además, el hombre fue imputado por el fiscal Carlos Giuliani del delito de tentativa de homicidio con los mismos agravantes por la agresión a su exsuegra y una hermana de 16 años de la víctima, por tentativa de homicidio con los mismos agravantes, por lo enfrenta una posible pena de prisión perpetua de hallarse culpable en un futuro juicio, detallaron las fuentes.
Karen Ríos (20) fue asesinada en una casa de la ciudad mendocina de Rivadavia y murió a raíz de una puñalada en el pecho que le aplicó su excuñado, a quien llegó a enfrentarse, de acuerdo a los resultados de los estudios forenses entregados a la Justicia.
Los voceros detallaron que, según los primeros resultados de la autopsia realizada al cuerpo de la joven, la muerte se produjo por una herida punzo cortante a la altura del pecho, al tiempo que se halló en una de sus manos varios cabellos, lo que hace presumir que se defendió y luchó con el agresor.
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Esos cabellos serán sometidos a estudios genéticos para ser cotejados con el ADN el principal sospechoso del femicidio, quien se encuentra detenido y fue imputado esta noche.
Se espera que el sospechoso en las próximas horas sea trasladado a un penal provincial.
El mismo hombre está acusado de atacar en el mismo hecho a otras tres personas, entre ellas a su exsuegra y madre de la joven asesinada, Adriana Salguero (47), quien continuaba hoy internada en terapia intensiva.
También fue herida otra excuñada del sospechoso, de 16 años, y el novio de la joven asesinada, Rodrigo Altamirano (21), resultó con un corte en un brazo.
La imputación apoya la hipótesis de los investigadores de que Sosa ingresó “sacado” a la vivienda para matar a su expareja, Melisa Ríos, fue directo a la habitación y, al no encontrarla, atacó a la hermana.
Tras el crimen, el agresor atacó a cuchilladas al resto de las personas que estaban en la casa, entre ellos a la madre de las hermanas Ríos.
Según informaron hoy desde el hospital Carlos Saporiti, la mujer “continúa en terapia intensiva debido las heridas corto punzantes recibidas en el rostro, cuello y tórax, aunque se encuentra estable y con buena evolución clínica”.
También se recuperaba favorablemente la otra herida, de 16 años, quien está en una sala común, asistida por un corte en el antebrazo derecho, agregaron los voceros.
Las dos pacientes reciben contención y acompañamiento por parte de profesionales de salud mental.