El papa Francisco pasó bien la noche en el hospital Gemelli de Roma, donde continúa internado desde el pasado 14 de febrero por una neumonía bilateral que lo tiene a maltraer.
Si bien su estado sigue siendo crítico, el pontífice argentino permanece controlado.
“La noche ha transcurrido bien. El papa ha dormido y está descansando”, informaron mediante un escueto comunicado oficial.
En el parte médico de ayer, confirmaron que Francisco no presentó nuevas crisis respiratorias tras la complicación del sábado y sigue recibiendo oxígeno mediante cánulas nasales. Además, le transfundieron dos unidades de glóbulos rojos, logrando un incremento en sus niveles de hemoglobina.
En cuanto a su trombocitopenia (bajo nivel de plaquetas), indicaron que “se mantuvo estable”. De todos modos, los análisis de sangre recientes arrojaron que padece una insuficiencia renal inicial leve, que actualmente está bajo control.
