Un británico aseguró que le pagó 300 libras –unos 400 dólares- a un veterinario para que examinara la renguera de su perro simplemente para descubrir que lo estaba imitando, ya que el hombre recientemente se había fracturado el tobillo.
Rusell Jones, residente en Londres, notó que Billy, su perro, mantenía una de las patas de adelante levantada cuando caminaba. Ante ello, lo llevó al veterinario para que lo examinara, incluso se le hicieron radiografías pero nada apareció.
Según cuenta actualidad.rt, el veterinario le preguntó al hombre desde hacía cuánto el perro estaba rengo y éste le respondió que desde el día después de haberse lesionado. Fue así que el médico afirmó que la mascota sólo imitaba a su dueño.
“Me costó 300 en gastos veterinarios y radiografías. Nada malo, solo compasión. Lo amo”, escribió Jones en un posteo de Facebook adjuntando el video en el que se ve al perro saltando al lado del hombre lesionado.
