El bitcoin continúa con una fuerte tendencia alcista y rompe máximos históricos ante la creciente popularidad, y pese al riesgo que implica la volatilidad a la que está sometido.
“Es el primer activo monetario certeramente escaso y digital”, explicó a la agencia Noticias Argentinas el presidente de la ONG Bitcoin Argentina, Rodolfo Andragnes, y destacó que es “divisible, transferible, almacenable e infalsificable” con una “emisión con certeza”. “Recomendamos que la persona que entre a bitcoin no lo haga por el precio, sino por haber estudiado sobre la relevancia de la escasez”, puntualizó, e indicó que “la gente especula, por lo que tuvo grandes subas y bajas en cortos períodos”.
Evaluó así que se debe tener una “visión de largo plazo” porque es esperable que se den nuevas caídas, pero insistió: “Son pequeñas situaciones que se pueden resolver”.
El reconocido economista de Nueva York Nouriel Roubini, quien anticipó la crisis de 2008, es uno de los principales críticos del bitcoin, al advertir que “prácticamente nada determina su precio”. Frente a ese tipo de expresiones, Andragnes analizó: “El valor es subyacente. Es su capacidad de ser el único sistema monetario que no se puede manipular por los Estados, que además permite ser transferido en forma digital e inmediata en el mundo”.
Sin embargo, alertó que “uno de los grandes riesgos es que hay muchísimas personas inescrupulosas que construyen esquemas piramidales alrededor del desconocimiento de la tecnología”.
“En el largo plazo no hay duda de que va a valer mucho más”, confió, y explicó que “hay varios tipos de billeteras” para operar. Consideró que en las denominadas billeteras on line “se pone lo que se va a gastar inmediatamente” y resaltó: “Cuando se quiere guardar a largo plazo, se hace en pendrive y se conecta sólo cuando se quiere ejecutar una transacción”.
Gustavo Neffa, socio y director de Research for Traders, advirtió ante NA que el bitcoin es “uno de los sectores más volátiles en materia de inversiones”, aunque destacó la “mayor cantidad de inversores institucionales”, como el caso de los bancos. Remarcó también que hay “mayor cantidad de empresas que aceptan pagos en bitcoins”, lo cual impulsa el interés.
“Se ha masificado y el riesgo es llegar último a la carrera de la especulación”, puntualizó, pero estimó: “Hoy creo que todavía hay margen para que siga subiendo”. Además, afirmó que “hay más medidas de seguridad”, pero insistió en que “la volatilidad” es el mayor riesgo: “Cuando tenga una corrección, puede caer un 20% ó 25%”. En tanto, Martín Eduardo Genero, analista de Clave Bursátil, evaluó que el bitcoin “viene marcando récords y no para de subir”, pero aseguró que hay “consenso” entre especialistas sobre “una corrección cuando llegue a los u$s 50.000 ó u$s 52.000”.
“Es un número en el que puede llegar a parar”, calculó en un contexto en el que la criptomoneda se ubica en torno a los u$s 49.000, pero señaló que lo proyectado puede cambiar ante la llegada de nuevos participantes.
“Esa actitud en masa es como un movimiento social y es imparable. Le pone un condimento de azar incontrolable”, apuntó. Genero subrayó que hay una gran cantidad de empresas dedicadas al negocio, por lo que se puede ingresar con tan sólo $500 ó $1.000.
De todos modos, enfatizó: “Si alguien se quiere proteger de posibles pérdidas y apuesta al bitcoin, por ahí se mete en algo que cae más que el peso argentino”.
“No estamos hablando de una inversión segura en términos de estabilidad de precios. No hay rentabilidad garantizada”, sostuvo en declaraciones a NA.
Respecto de la fuerte suba, argumentó: “Es el miedo de que todos escucharon que hay que comprar porque sube, pero termina pichándose en algún momento. El último que compre se va a quedar sin nafta”.