A días de la asunción de Javier Milei, el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, se mostó preocupado por el contexto por el que transita el país.
“Estamos mal. No tenemos accesos a los insumos. Todos los días tenemos presiones de todas las empresas. Hay un proceso inflacionario que no lo queremos para nada. Quien gana con la inflación es quien especula, no quien produce. Hay que facilitar el proceso de inversión. Tenemos muchas expectativas”, sostuvo Funes de Rioja en declaraciones a Radio Mitre.
En otro pasaje de la charla, el presidente de la central industrial subrayó: “No me llaman tanto los nombres, pero queremos ver el programa para lograr estabilizar” la macroeconomía.
El dirigente auguró que si Milei tiene éxito en ese desafío, “la Argentina no va a necesitar pensar en pisar los precios o salarios, sino que se van a fijar por la oferta y la demanda. Será un país normal como cualquier otro”. En lo que respecta a los nombres que designará Milei para que encabecen el proyecto económico, sostuvo: “Por cuestiones políticas estamos pendientes. Fue un tema de mucha vigencia en la conferencia industrial”.
Funes de Rioja pidió “ordenar la macro” y “darle el rol que le fue quitado al sector privado: facilitar el proceso de inversión y el acceso al crédito para el equipamiento tecnológico, para producir y competir”.
Tiempo atrás, el presidente de la UIA criticó la decisión implementada por Sergio Massa, quien ordenó una suma fija de $60.000 para empleados públicos y privados que perciban salarios inferiores a los $400.000.
“No compartimos la suma fija, pero la UIA la respeta, porque creemos en el orden de la ley”, añadió el jefe de la entidad fabril. En la misma línea con sus declaraciones hace algunas semanas, insistió en que “el camino para las discusiones salariales para el sector industrial son los acuerdos paritarios”.
“Necesitamos un entorno favorable para la creación de empresas y empleo”, continuó. También criticó el control de precios implementado por el Gobierno actual: “Venían aumentando a una tasa de 3 a 5 por ciento. El control de precios significó aumentos pautados por el Gobierno y aceptados (porque no había más remedio) por el sector productor”.
Funes de Rioja añadió: “En los últimos meses la escalada inflacionaria fue fenomenal, por eso también la suba de precios”. Y apuntó la necesidad de un reforma tributaria: “hay que sacar los 160 impuestos. Nueve impuestos están bien, pero los demás son pura burocracia. Queremos producir y exportar”, completó.