La administración de Alberto Fernández decretó suspender las exportaciones de carne, en un intento por frenar el alza de precios en la economía.
Por este motivo, la Resolución 75/2021 publicada en el Boletín Oficial manifiesta que “se ha considerado que la suspensión sea por un plazo razonable de TREINTA (30) días, desde la publicación de la presente medida”.
Esto generó el rechazo inmediato de las entidades del agro, que anunciaron un “cese de comercialización” desde el jueves hasta finales de mes.
Los dirigentes de la Mesa de Enlace advirtieron, además, que el paro puede ser el inicio de “medidas más fuertes”, si no hay respuestas al reclamo en contra del freno a las exportaciones.
Al respecto, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, respaldó el cierre de las exportaciones de carne de manera temporal, aunque aclaró que la medida puede durar menos de treinta días, si se alcanzan las soluciones pretendidas por el Gobierno.
Pese a ello, el funcionario nacional aclaró: “Eso no significa que no estemos dialogando”. “Es una instancia de diálogo”, insistió, y anticipó que este miércoles se llevarán a cabo reuniones con representantes del sector.De ese modo, puntualizó: “Ojalá las restricciones sean por menos tiempo. Si los objetivos se cumplen antes del plazo, la idea es levantarlas”.
El titular de la cartera productiva se refirió a los “desórdenes”, al advertir sobre “procesos de evasión” por parte de la industria frigorífica, al tiempo que criticó los aumentos “desmedidos” de la carne.
Según estudios privados, los precios del asado y las milanesas subieron 70% promedio en el último año, al posicionarse en lo más alto de los aumentos en la canasta básica alimentaria.
Ante los elevados precios y la caída de poder adquisitivo, el consumo de carne se ubica en el menor rango en cien años.