Real del Padre sigue siendo el epicentro de la atención tras el paso de un desastre natural que los habitantes describen como una especie de tornado. El delegado Ramón Pérez, mencionó “Hemos vivido un desastre natural que derribó postes de hormigón, techos de casas e industrias”.
Desde que cesó la tormenta, la delegación municipal permaneció abierta hasta la medianoche. Este martes, los trabajos comenzaron desde temprano. Muchas familias se han acercado en busca de ayuda, mientras otras permanecen en sus hogares sin electricidad, telefonía ni agua.
“Estamos trabajando junto a Desarrollo Social, Bomberos Voluntarios, la Cooperativa Eléctrica Cecsagal, el centro de salud, Obras Públicas, Defensa Civil, Electrotecnia y vecinos voluntarios”, detalló Pérez, quien destacó la organización y el esfuerzo colectivo.
Una semana para la normalidad y ayuda urgente
Según las estimaciones, se necesitará al menos una semana para restablecer los servicios esenciales. Mientras tanto, la situación sigue siendo crítica debido al pronóstico climático similar para la región.
“Necesitamos agua. No hay electricidad ni suministro regular. Estamos usando camiones cisternas para rellenar tanques y entregando nylon para cubrir techos dañados”, explicó el delegado, quien además subrayó la urgencia de declarar el estado de emergencia a nivel provincial y nacional.
El intendente Omar Félix elevó un pedido al Concejo Deliberante para tratar la declaración de emergencia en Real del Padre y Jaime Prats, con el objetivo de habilitar fondos municipales para atender las consecuencias del desastre. Se prevé que la solicitud sea tratada este miércoles.
Ver: Trágico incendio en Ciudad: una carnicería sufre pérdidas totales