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El truco de la “empanada de algodón” para burlar los controles mendocinos de cuarentena

La viveza menduca no tiene límites.

El pasado 4 de agosto, la Ciudad de Mendoza estableció una normativa que dispone la “prohibición del expendio de bebidas sin consumo de comida elaborada en cocina y servida al plato, en todos los locales gastronómicos (restaurantes, parrilladas, pizzerías y sandwicherías)”.

“Es decir —aclara la norma— que ninguno de estos locales de la Ciudad podrá solo vender bebidas si estas no son acompañadas de una comida elaborada y que se sirva al plato”.

En tal contexto, la viveza criolla (en este caso la “viveza mendocina”) logró sortear la situación a través del “truco de la empanada de algodón”, revelada en su cuenta de Twitter por Lautaro Soza-Torrijos.

“¿A algún ñoqui de la municipalidad de Mendoza se le ocurrió que para “reducir” la gente en los locales, sea obligatorio tener que pedir algo para comer en bares? Frente a esto, los locales de la Aristides implementaron la empanada fria, esta empanada es debitada como ‘docena de empanadas’, por si aparece un munipa a controlar; existe un acuerdo tácito Cliente-Mozo para que esa empanada quede fija en el centro de la mesa, sin comer, persuadiendo a los empleados de Ulpiano”.

A continuación, el hilo completo de tuits explicando la maniobra.

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