Boca Juniors planea realizar un fuerte movimiento en el próximo mercado de pases que se abrirá a principios de junio, en la búsqueda de recuperar el protagonismo internacional y conquistar la Copa Sudamericana.
El club de La Ribera, liderado por su presidente y figura histórica Juan Román Riquelme, tiene en la mira a un viejo anhelo: Maximiliano Meza.
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El técnico de Boca, Diego Martínez, mostró repetidamente que su plantel actual carece de la profundidad necesaria para afrontar con éxito todas las competencias. A menudo, Martínez se ve obligado a utilizar siempre a los mismos 13 o 14 jugadores, sin poder agotar las cinco ventanas de cambios en la mayoría de los partidos.
Este déficit de recambio ha sido una constante en su estrategia y, por ende, el próximo mercado de pases se presenta como una oportunidad crucial para reforzar el equipo.
Maximiliano Meza, actualmente en Rayados de Monterrey, es la pieza que Boca necesita para darle un salto de calidad al plantel. Riquelme ha tenido a Meza en su radar desde hace tiempo, y el interés del club por el volante de 31 años no es nuevo.
En 2019, el Xeneize intentó ficharlo, pero sin éxito. El interés se reavivó el año pasado, pero en ese entonces, Meza optó por renovar su contrato en México.
Sin embargo, el panorama cambió. De acuerdo a lo informado por Olé, Meza, ex jugador de Independiente, se encuentra en una situación contractual que podría facilitar su salida. Su contrato con Monterrey finaliza en diciembre, y el club mexicano estaría dispuesto a desprenderse de él en junio, en el próximo mercado de pases.
Según informaron desde México, el traspaso de Meza rondaría el millón de dólares, una cifra accesible para Boca Juniors.