Tras lo reiterados aumentos en el precio de la carne en mostradores, suspensiones y reducciones salariales, el ministerio de Producción escuchó a los referentes del sector frigorífico y ampliará el cupo actual para las exportaciones de carne vacuna con el permiso de la venta al exterior de la vaca que se vende a China -y no se consume en Argentina- y los cortes kosher.
Según El Cronista, autoridades gubernamentales pretenden que la resolución salga en los próximos días. Sin embargo, la medida está retrasada porque el nuevo sistema de control será más complejo que el actual, ya que el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) deberá iniciar a controlar la categoría de las vacas, además de los cortes.
“Los frigoríficos exportadores, aunque podrían enviar la producción al mercado interno, tienen el problema de que localmente no se puede absorber por la caída de poder adquisitivo”, explicó David Miazzo, jefe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA).
“Por eso el Gobierno piensa en una flexibilización: categorías como la vaca China no tienen cabida en el mercado local y, además, hay una producción que no hay dónde meterla porque el consumidor argentino no la puede pagar”, siguió el dirigente.
La resolución vigente hasta el 31 de agosto permite un cupo mensual del 54% del volumen promedio mensual exportado en 2020. Un 8% de esta cifra está integrada por la cuota Hilton que son 29.400 toneladas anuales, la cuota 481 también con destino a la Unión Europea que son 24.250 toneladas anuales y los envíos a Estados Unidos que representan 20.000 toneladas anuales.
La exportación de la carne kosher no está permitida dado que no es una cuota. Representa un 7,5% del total del volumen y con la nueva resolución se permitirá exportar. Por otro lado, liberarán los embarques de la vaca manufacturera, de peor calidad que se envía a China y no se consume en el país.
Los cortes de carne vacuna sufrieron un aumento en promedio del 7,7% en junio en las carnicerías, de acuerdo a las cifras del IPCVA. De todos modos, los precios de la hacienda con destino a faena -que se les paga a los productores- se desplomaron, ¿Cuál es la explicación?
“Si se hace un análisis anual, el precio de la carne de mostrador venía yendo por debajo de lo que había sido el precio de la hacienda. Las subas actuales son por una recomposición de márgenes de los frigoríficos, matarifes y carnicerías. Durante julio no debería haber tantos aumentos”, concluyó Miazzo.