La gestión de Alberto Fernández se encuentra en el ojo del huracán luego de descubrirse un escandaloso caso de subsidios fantasmas en los comedores comunitarios que formaban parte del Plan Nacional Argentina Contra el Hambre, instaurado durante la pandemia.
Según informes del Ministerio de Capital Humano, encabezado por la ministra Sandra Pettovello, aproximadamente el 50% de estos comedores no existían realmente, lo que ha generado una denuncia penal y una profunda investigación sobre la gestión anterior.
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Los datos alarmantes surgieron a raíz de auditorías exhaustivas realizadas por el Ministerio, las cuales revelaron discrepancias significativas entre los datos de preinscripción y la realidad de los comedores.
En algunos casos, las direcciones declaradas nunca albergaron un comedor o merendero, mientras que otros sencillamente dejaron de funcionar como establecimientos de ayuda alimentaria. Este hallazgo desencadenó una investigación sobre el programa Argentina Contra el Hambre, presentado en enero de 2020 con el objetivo de brindar seguridad alimentaria a los sectores más vulnerables del país.
Según la denuncia presentada por la secretaría legal del Ministerio de Capital Humano, el proceso de inscripción en el programa constaba de tres etapas: preinscripción, validación y matriculación.
Esta última fase, que otorgaba beneficios por un período de dos años, requería una revalidación posterior para continuar siendo beneficiario.
Sin embargo, la gestión anterior no llevó a cabo los controles necesarios sobre los comedores que recibían ayuda, lo que permitió la inclusión de comedores inexistentes en el sistema.