El gasto público registró un incremento real del 11,4% interanual durante el primer trimestre de 2025. Según un informe de la consultora Analytica, este aumento habría sido compensado por mayores ingresos fiscales, lo que permitió al gobierno sostener el superávit fiscal.
La política de gasto implementada en los primeros meses del año mostró una orientación clara: más recursos para las provincias y la seguridad social, y un fuerte ajuste en obra pública y subsidios económicos, principalmente en los sectores de energía y transporte.
Uno de los datos más destacados fue el incremento real del 46,8% en las transferencias a las provincias respecto al mismo período de 2024. Dentro de esta partida, los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) se dispararon un 282,6% interanual. En marzo, se asignaron fondos de ATN a San Juan, Santa Fe y Neuquén (cada una por $4.000 millones) y a la provincia de Buenos Aires ($10.000 millones).
En materia de seguridad social, las jubilaciones y pensiones crecieron un 28,2% real en el primer trimestre, mientras que las asignaciones familiares y por hijo lo hicieron un 20,2%. En particular, la Asignación Universal por Hijo (AUH) registró un aumento del 29,5%.
En contraste, los recortes se hicieron sentir en la obra pública, con una caída real del 46,2%. Los programas sociales también sufrieron un ajuste, con una reducción real del 26,4%.
Ver: Caos aéreo en Argentina: más de 250 vuelos cancelados por el paro de la CGT
El sector de los subsidios económicos fue uno de los más afectados por el ajuste, con una baja real del 48,9% en el trimestre. Los subsidios a la energía se desplomaron un 60,9% en el acumulado del trimestre, y un 63,4% solo en marzo.
En el caso de los subsidios al transporte, se registró una baja real del 31,9% en el primer trimestre, destacándose el recorte en el Fondo Fiduciario Sistema de Infraestructura del Transporte (FFSIT), que cayó un 42,4% interanual.
