Anticipando lo que será la gran fiesta de oeste argentino, el Día de Campo fue la excusa perfecta para presentar en sociedad la Fiesta Nacional de la Ganadería.
La edición 41 de la feria ganadera en General Alvear regresó a su mes tradicional y en esta ocasión irá del 4 al 8 de mayo.
Para el lanzamiento, alrededor de 500 personas entre productores, empresarios, comerciantes, vecinos y autoridades, traspasaron la tranquera de la estancia Ituzaingo en la zona de Gaspar Campos, a unos 70 kilómetros de Alvear, para adentrarse en un ambiente netamente campero.
“El Día de Campo nació para promocionar la Fiesta de la Ganadería, pero con la idea de hacer algo totalmente distinto y que mejor que tener un escenario como este, un campo en donde la gente transforma ese monte en una unidad productiva que le agrega valor a Mendoza”, comentó Jorge Noguerol, presidente de la Cámara de Comercio alvearense, entidad organizadora del evento.
A su vez, destacó. “Realmente nos tocó un día espectacular para presentar la Fiesta y ha superado las expectativas que teníamos, la gente ha respondido muy bien. Han convertido 200 hectáreas de monte en una plantación espectacular de maíz y sorgo para alimento de los animales”, comentó el presidente de la entidad empresaria.
“Esto nos permite demostrar fehacientemente que cuando el productor cuenta con mínimas condiciones y herramientas que les entrega el Estado, se anima y lo traduce en inversiones y desarrollo”, insistió el comerciante que preside la Cámara de Comercio de Alvear.
Una fiesta sin restricciones
Del 4 al 8 de mayo el predio ferial de General Alvear en la ruta 188 y calle 7 volverá a abrir la tranquera para una nueva edición de la gran fiesta del oeste argentino.
Desde el miércoles al domingo el público se encontrará con un predio con más de 250 stand al aire libre y en carpas estructurales en la exposición comercial, industrial y artesanal.
El remate de hacienda que este año vuelve completamente a la normalidad y se esperan alrededor de 2.000 cabezas de ganado.
A su vez, el asado más grande del mundo volverá a humear en todo su esplendor. El sábado 7 de mayo estará el almuerzo tradicional para 2.000 comensales con los costillares al ensartador como emblema.
Una inversión de 1 millón de dólares en medio del monte
En medio del campo de secano la familia Sáez desmonto y transformó 200 hectáreas de monte que actualmente se emplean para el cultivo de maíz y sorgo. Único en todo Mendoza.
El sistema de pivot central que emplean para riego se abastece con perforaciones que llegan a unos 140 metros de profundidad.
“Cada pivot nos permite regar entre 100 y 110 hectáreas y a producción es toda para consumo de nuestros animales”, comentaron.
Presentes en el campo y la fiesta
Entre las autoridades que se acercaron hasta la estancia Ituzaingo para vivir el Día de Campo participó el intendente Walter Marcolini, llegó el senador nacional Alfredo Cornejo y el ministro de Infraestructura Mario Isgró.
“Creemos que están dadas todas las condiciones para que del 4 al 8 de mayo volvamos a vivir en la época, porque recuperamos la fecha original de la Fiesta de la Ganadería”, dijo el intendente Marcolini.
Por su parte, el senador Alfredo Cornejo reconoció que es un asiduo visitante al Día de Campo ya que “siempre me gustó y que se vuelva a hacer en una estancia como en otras oportunidades es placentero. Es un día de campo en serio”, comenzó diciendo.
Y señaló. “Estuvo muy bien elegido el lugar, porque representa una de nuestras potencialidades como actividad económica”.
Reconocimiento del campo a los héroes de la patria
Los 500 comensales que colmaron la carpa donde se sirvió el almuerzo no faltó el reconocimiento desde la Cámara de Comercio a los veteranos de Alvear que participaron de la guerra de Malvinas al conmemorarse el 40 aniversario de la gesta.
En nombre de los veteranos de guerra Ricardo Chiapa tomó la palabra y con a vos entrecortada por momentos y lágrimas en los ojos, dijo algunas palabras.
“Esos jóvenes que llegaron con poca o hasta nula instrucción demostraron coraje, valor, patriotismo, amor a la patria, no retrocedieron un milímetro a pesar del frío, la lluvia, el barro que se pega a los borceguíes y eran cada vez más pesados. Ellos con su valor fueron a combatir y a cada balazo respondieron con un grito de viva la patria”.