Carlos Juárez, uno de los tripulantes del yate del que no volvieron a tenerse noticias, es oriundo de Mendoza.
Este hombre, junto a otro argentino, un cubano y un mexicano, viajaban en una embarcación de ayuda humanitaria a Haití, cuando de un momento a otro, se perdió el rastro de los mismos.
Voceros de Cancillería informaron que están abocados junto al Consulado de Playa del Carmen, a fin de poder encontrar el yate.
Según reveló el cónsul, la última comunicación fue recibida a 130 millas del balneario de Cozumel, una isla que se encuentra frente a Playa del Carmen, y en base a lo informado por la marina mexicana, ese día no se detectaron contingencias climáticas adversas en la zona.
Los argentinos viven en Puerto Aventuras, en cercanías de Playa del Carmen, donde Juárez posee una empresa de yates.
Juárez tiene 43 años, está casado y tiene dos hijas. Desde hace tiempo vive en Playa del Carmen.
Renzo Spasiano, de 20 años, es de Flores. El joven llegó a México a comienzos de este año, luego de haberse quedado sin trabajo.
La embarcación partió desde Haití el sábado pasado. Luego, realizó una parada en Jamaica. El domingo siguieron camino a México, y recién el martes fue la última comunicación que dieron.
Trascendió que el yate tenía una rotura menor en el casco, pero que no perjudicaba en nada la navegación.