En noviembre del año pasado, para los Sosa Fiorelli comenzó una verdadera pesadilla. Por aquellos días, Sergio Alejandro, uno de los cuatro hermanos, desapareció de la noche a la mañana en Rodeo de la Cruz, Guaymallén.
El hombre, de 32 años de edad, salió de su casa y jamás volvieron a tener noticias sobre su paradero.
Sergio Alejandro, que padece problemas de consumo, no era la primera vez que se iba de un momento a otro y sin avisar. “Él se iba, se había ido otras veces pero siempre volvía”, dijo Belén Agüero, su cuñada.
La mujer, sumamente preocupada por el paradero de su familiar, accedió a charlar con News Online, y contó que en otras ocasiones, “se iba y paraba en casa de gente conocida. Esta vez pasó el tiempo y no volvió más, por eso decidimos radicar la denuncia”.
Luego de la presentación ante las autoridades, y a medida que el caso fue tomando notoriedad en las redes sociales, una mujer aseguró haberlo visto.
“Una chica nos llamó diciendo que lo habían visto en un micro por Colonia Segovia”, recordó Belén, y precisó: “Le avisamos a la policía, ellos fueron y hablaron con la mujer”, sin embargo todo quedó en la nada.
“Ellos (por la policía) a veces nos llaman y nos preguntan si tenemos alguna novedad, pero no más que eso”, añadió.
Desesperados por saber en dónde está Sergio Alejandro, su familia decidió ofrecer una especie de recompensa para quien aporte datos claros que permitan el esclarecimiento del caso. “Ahí fue cuando esta chica se contactó y nos dijo que lo había visto arriba de un micro. Ella nos dijo que no quería la plata”, sostuvo.
La pareja de Belén y hermano del joven, Carlos Daniel, también admitió haber recibido llamados anónimos, y en los cuales le juraron haber visto a Sergio Alejandro “en San Martín y también en Corralitos”.
Ante la consulta sobre qué creen que puede haber pasado, los Sosa Fiorelli no descartan absolutamente nada.
“Yo pienso que si algo a él lo hubieran matado, hace rato habría saltado. Primero me dijeron que lo habían visto por Colonia Segovia, después nos contaron que había sido visto en San Martín, luego en Corralitos. Yo creo que anda por esas zonas”, señaló su hermano.
“Ni bien lo enganche la policía, creería que lo van a llevar al Hospital El Sauce porque tiene problemas. Para mi no quiere hacerse ver, pero de ahí en más no sabemos nada de nada”, terminó diciendo Carlos Daniel, que sigue moviendo cielo y tierra para intentar dar con su hermano.