Ángel Di María, estrella de la Selección argentina, enfrenta nuevas amenazas en Rosario en medio de crecientes rumores sobre su posible regreso a Rosario Central. La situación escaló dramáticamente esta semana cuando desconocidos vandalizaron un mural en su honor y balearon una estación de servicio, dejando un mensaje intimidante que rezaba: “Te estamos esperando“.
El último episodio de esta escalada de violencia tuvo lugar en la estación Puma, ubicada en la calle Oroño al 5000, donde los atacantes dispararon contra el establecimiento antes de dejar una nota dirigida al futbolista. Este incidente subraya la tensión alrededor del jugador y su familia, quienes ya habían sido objeto de amenazas en marzo.
La serie de intimidaciones hacia Di María y su familia está vinculada a la posibilidad de su retorno al club rosarino. El vandalismo del mural, ubicado en el club El Torito en el barrio donde Di María comenzó su carrera, y las palabras “¿Todavía vas a volver?” pintadas con aerosol, refuerzan el mensaje de hostilidad.
El 3 de marzo de este año, otro incidente ocurrió cuando un automóvil baleó la entrada del barrio privado en Funes, donde vive la familia de Di María. En esa ocasión, se dejó un mensaje dirigido al padre del jugador, advirtiendo sobre las consecuencias de un posible regreso a Rosario Central.
A pesar de las amenazas, Cristian “Kily” González, excompañero de Di María y actual director técnico de Unión, declaró recientemente que habló con el futbolista y que este “se muere por ponerse la camiseta de Central”. Sin embargo, González reconoció la complejidad de la situación debido a la violencia y el riesgo que implica, subrayando que la seguridad y bienestar de la familia de Di María son primordiales.