Con el propósito de restringir la importación de duraznos industrializados hasta que se logre conformar una mesa de diálogo con todos los actores de la cadena los diputados nacionales mendocinos Omar de Marchi y Federico Zamarbide presentaron un proyecto de resolución.
Es dable destacar que el mismo fue avalado y acompañado por Alfredo Cornejo, Claudia Najul y Luis Petri y entre sus objetivos se destaca la elaboración de un plan consistente y sustentable que refiera a la política de comercio exterior.
Esto se da luego de que trascendiera que el Gobierno Nacional autorizó la importación de duraznos enlatados de China. Ello encendió una alarma por un extenso listado de razones. Por tanto, para que esta situación no quede en el mero reclamo público, los legisladores de Juntos por el Cambio decidieron tomar cartas en el asunto.
En ese sentido, entre los argumentos que se deslizan en el proyecto de resolución presentado el lunes 14, se encuentra el perjuicio para las economías regionales que genera que una empresa mendocina importe estos productos, siendo que esta provincia se caracteriza por la fortaleza de su producción de durazno.
Acto seguido, se plantea el absurdo de la política económica que hace muy complicado importar maquinaria para la producción, como bienes de capital, pero sí facilita las gestiones para que se pueda hacer con productos finales que, en muchos casos, son fomentados mediante prácticas de dumping.
Asimismo, se señala que la industria conservera argentina ostenta una fuerte presencia en el mercado mundial, y en el caso de los duraznos, se producen en su totalidad en Mendoza, con una calidad reconocida internacionalmente por su sabor, tamaño y consistencia.
“La cadena productiva de duraznos mendocinos abarca tanto al sector primario como al industrial, y alcanza a 7 mil hectáreas de frutales con una producción anual que oscila entre 100.000 y 150.000 toneladas anuales. Más aún, esta industria genera puestos de trabajo en 27 plantas industriales y casi mil productores en toda la provincia, a los que se suman entre 1.515 y 3.536 familias en empleo temporario para tareas de poda, raleo y cosecha, entre otras”, se enumera.
Por último, los diputados señalan que los duraznos argentinos no sólo son un alimento de consumo masivo en el país (que incluso están en el programa Precios Cuidados), sino que además se exportan a los países limítrofes con una cadena competitiva y una producción agroindustrial que muchas empresas locales se han esforzado por mantener y crecer.