Una familia promedio mendocina necesitó $206.389 para no ser catalogada como pobre según las estimaciones del mes de mayo, informó este miércoles por la tarde la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económica (DEIE).
La Canasta Básica Total (CBT) que equivale al conjunto de bienes que satisfacen las necesidades nutricionales de las personas, teniendo en cuenta los hábitos de consumo de una población determinada, aumentó $12.503 respecto a la última medición.
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De esta forma, los hogares mendocinos que cuenten con un ingreso menor a $206.389, se consideran pobres.
Por su parte, la Canasta Básica de Alimentos (CBA) atribuida a el conjunto de bienes y servicios que satisfacen las necesidades comunes de la población, teniendo en cuenta los hábitos de consumo de una población, sufrió un incremento de $5496 respecto al mes de abril.
Así, este grupo necesitó contar por lo menos con $85.284,71 para no ser considerados pobres extremos o indigentes.
