El pasado martes 8 de febrero, Rolando Ángel Aquino murió en una clínica privada. Por este hecho, su mujer Karen Leylen Oviedo, quedó detenida. La Justicia cree que la agresora usó etilenglicol para perpetrar el hecho.
Con el correr de las horas, y a medida que la investigación avanzaba, los sabuesos llegaron a la conclusión que la mujer utilizó un método de envenenamiento del que poco se conocía en Mendoza.
La Fiscalía de Homicidios, encabezada por Claudia Ríos, comenzó a analizar esa hipótesis luego de que detectaran que la mujer había comprado a través de internet un anticongelante para vehículos.
Además, de acuerdo a lo informado por los colegas de El Sol, los investigadores notaron que la mujer utilizó su teléfono celular para averiguar en Google “cuál es el veneno más letal” y además se interiorizó en “cómo borrar el historial de búsqueda”.
Tras el análisis del producto usado, notaron que está compuesto por etilenglicol, que es un químico incoloro, inodoro y con sabor dulce.
Sitios especializados, describieron que el cuerpo absorbe rápidamente el químico y metaboliza el hígado. La ingesta de este producto, puede acarrear complicaciones orgánicas graves.
Además, explicaron que el síntoma más característico es parecido a la embriaguez alcohólica.
Ingerirlo puede provocar náuseas, agitación, hiperventilación, confusión y alteración de la conciencia hasta llegar a un coma profundo.
Frente a este panorama, es que Oviedo quedó detenida después de que la Justicia contara con todas estas pruebas, que sin lugar a dudas la complicarán en demasía.
Además de todo esto, algunas otras pistas hicieron que la mujer fuera imputada y corra el riesgo de afrontar una condena a prisión perpetua.