Desde la Asociación Bancaria (AB) y las cuatro cámaras empresarias del sector llegaron a un acuerdo por la actualización salarial del 2,1% pendiente para 2020, y también una mejora del 29% sobre el salario resultante para 2021.
La misma se hará efectiva en tres tramos, las cuales se abonarán en dos cuotas de 11,5% desde enero y abril, y de otro 6% a partir del 1 de agosto.
Tras una serie de negociaciones, las partes acordaron a última hora del jueves revisiones salariales en septiembre y noviembre, y un salario inicial (que incluye participación en las ganancias) en enero de casi $ 92.000, de $ 101.000 en abril y de $ 106.000 para el mes de agosto.
Los representantes del gremio señalaron que habrá revisiones salariales en septiembre y noviembre próximos, dependiendo el índice del proceso inflacionario.
También, la negociación convencional abarcó el pago de un bono inicial de $ 89.906,94, que ya es habitual en el gremio, y aumenta según cada categoría, por el “Día del Bancario”. Esta es una jornada no laborable, que se conmemora el 6 de noviembre.
El salario inicial para enero último, incluyendo participación en las ganancias (ROE), será de $ 87.773,67 más $ 3.964,34, respectivamente, lo que arroja un ingreso de $ 91.738,01; para abril de $ 96.826,56 y $ 4.373,22 (un total de $ 101.199,78 y, desde agosto próximo, de $ 101.549,81 más $ 4.586,55 (totalizando $ 106.136,36).
El Economista informó que La Bancaria, cuya paritaria expira el 31 de diciembre de cada año, intentó en cuatro encuentros virtuales en el Ministerio de Trabajo un acuerdo salarial pendiente para 2020 y para este año, pero luego de arduas y extensas negociaciones, no hubo consenso.
Por lo mismo, este mediodía -luego del cuarto encuentro infructuoso- convocó de urgencia al plenario de secretarios generales del gremio para adoptar “inmediatas medidas de fuerza”, lo que generó intensas y rápidas negociaciones para evitar un conflicto.
De esa forma y, luego de varias horas de diálogo, sindicalistas y empresarios acordaron la paritaria del año anterior y convinieron la de 2021, que tendrá dos revisiones salariales.
Palazzo y Berrozpe, en representación del Secretariado General Nacional, habían denunciado ayer por la tarde “la provocación de las cámaras patronales privadas ABA y Adeba, que intentan condicionar a la banca pública y generar un conflicto al Gobierno nacional”.