Comerciantes, artesanos, agrimensores, apasionados por volar y navegar son algunas de las profesiones y hobbies de los 14 descendientes directos vivos de Leonardo da Vinci, revelaron a Télam los investigadores italianos Alessandro Vezzosi y Agnese Sabato, luego de dar a conocer un estudio que ha rastreado el árbol genealógico del genio florentino a lo largo de 690 años y 21 generaciones, y en el que han incluido también a las mujeres descendientes.
“Las mujeres estarán bien representadas en la base de datos llamada ‘GeniaDaVinci’ que estamos creando con todos los datos familiares. Sin embargo, el propósito de este artículo era trazar un linaje masculino directo para identificar a los varones portadores del cromosoma Y, el único que permite un análisis científico preliminar”, explicaron a Télam desde Italia los investigadores Alessandro Vezzosi y Agnese Sabato, luego de dar a conocer en la revista Human Evolution el resultado de 10 años de investigación que tiene como fin último avanzar en la búsqueda del ADN del pintor e inventor italiano, e intentar desentrañar los aspectos genéticos de su genialidad.
Al ser consultados por esta agencia por la presencia femenina en el árbol genealógico del autor de “La Gioconda”, ambos investigadores -dos de los principales expertos en Leonardo da Vinci en el mundo- compartieron una fotografía que forma parte del estudio de una mujer llamada Dina Vinci (generación XVII), que exhibe sorprendentes afinidades morfológicas con la imagen del retrato del artista del Renacimiento, y que en el estudio publicado aparece junto a otras mujeres bajo el título “Descendencia femenina”.
Pero lo cierto es que la pesquisa apunta a dar con información útil sobre el ADN del autor del “Hombre de Vitruvio” y, en particular, sobre el cromosoma. Y, que se transmite a los descendientes masculinos y permanece casi sin cambios durante 25 generaciones, detallaron los expertos.
La comparación del cromosoma Y de los actuales parientes masculinos con el cromosoma Y de sus antepasados, en los cementerios, permitiría verificar una línea familiar ininterrumpida y contribuiría a certificar el propio marcador del cromosoma Y de Leonardo Da Vinci, a través de tecnologías de biología molecular.
Se trata de una investigación en curso que se puede pensar como un “mapa genealógico en expansión” de los parientes de Da Vinci para reconstruir su genoma y, de tener éxito, -tal como escriben en la publicación-, con la confirmación de su ADN, poder responder las razones biológicas que hay detrás de su genialidad.
Además, podrían esclarecer datos sobre su envejecimiento, peculiaridades como ser zurdo, su extraordinaria visión, además de que podría ayudar a verificar la autenticidad de las obras de arte y los materiales manipulados por el pintor, anatomista, botánico, científico, inventor y urbanista.
Pero la evidencia genética también podría ayudar a los científicos a determinar si los restos enterrados en el Castillo de Amboise, Francia, realmente pertenecen a Leonardo (1452-1519), quien tuvo 22 hermanastros pero no tuvo hijos; y es justamente a partir de su medio hermano, Domenico (hijo de Piero) que se reconstruye el mapa que por ahora alcanza a 225 individuos, entre ellos más de 50 descendientes directos por línea paterna, incluidos los 14 que viven.
El arco temporal de la investigación se extiende desde 1331 hasta la actualidad y rastrear cada uno de sus descendientes es un trabajo complicado, especialmente en el caso del polímata renacentista, hijo de Ser Piero (un notario florentino) y Caterina (una joven campesina), nacido en 1452.
De los 14 descendientes a los que se hace referencia en el estudio, solo uno sabía previamente acerca de sus vínculos con el ícono del Renacimiento, mientras que varios de ellos todavía viven en las ciudades vecinas a Vinci, en la Toscana.
“Los descendientes vivos de Da Vinci tienen entre 1 y 85 años, son todas personas de nacionalidad italiana. Los ancianos están jubilados y han tenido trabajos corrientes como oficinistas, comerciantes, artesanos. Los más jóvenes son todos oficinistas y dos son agrimensores. Uno de ellos era un apasionado de la aviación y la navegación”, dijeron Alessandro Vezzosi, historiador del arte y fundador del Museo Ideale Leonardo da Vinci, y Agnese Sabato, historiadora, escritora y presidenta de la Asociación del Patrimonio de Leonardo Da Vinci.
– Télam: Encontraron 14 descendientes vivos de Leonardo da Vinci. ¿Existe descendencia femenina de Da Vinci?
– Agnese Sabato: En el nuevo árbol genealógico global de los Da Vinci, hemos querido incluir los datos de todas las mujeres, que generalmente se pasan por alto tanto en los “Libros de Familia” del siglo XIV, como en los árboles históricos. Y esto sucedía por varias razones: las hijas sólo excepcionalmente se convertían en herederas: se les entregaba una dote y, a menudo, se las excluía de los legados patrimoniales. Además, las hermanas e hijas que se casaban se separaban de la familia de origen. En la base de datos “GeniaDaVinci” que estamos creando con todos los datos familiares, las mujeres estarán bien representadas. Sin embargo, el propósito de este artículo era trazar un linaje masculino directo para identificar a los varones portadores del cromosoma Y, el único que permite un análisis científico preliminar.
-T: ¿Cuál ha sido para ustedes el descubrimiento más impactante de esta investigación?
-Alessandro Vezzosi: Se trata sin duda de la identificación de 14 descendientes masculinos en línea directa (hasta la 21ª generación) del hermano de Leonardo, Domenico (sexta generación). Hasta 2016 solo habíamos descubierto dos descendientes directos por línea masculina, uno de los cuales lamentablemente falleció en 2018. Sin embargo, se seguirán investigando otras posibles ramificaciones.
-T: ¿Cuáles son las principales profesiones u oficios de los descendientes vivos de Da Vinci?
-Agnese Sabato: Todas son personas corrientes. Todos son de nacionalidad italiana. Su edad oscila entre 1 año y 85 años. Los mayores están jubilados, y habían sido oficinistas, comerciantes, artesanos; los más jóvenes son oficinistas; dos son agrimensores… Uno de ellos, el mayor, era un apasionado de la aviación y la navegación, e inventó algunas patentes.
-T: ¿Podría la confirmación del ADN de Leonardo explicar las razones biológicas de su genio?
– Alessandro Vezzosi: Los próximos pasos son, por supuesto, colaborar activamente con el Departamento de Biología de la Universidad de Florencia, dirigido por David Caramelli, en el marco de las actividades del “Proyecto ADN Leonardo Da Vinci” (dirigido por el científico Jesse Ausubel, de la Universidad Rockefeller de Nueva York; y apoyado por la Fundación Richard Lounsbery), para proceder al análisis del ADN de los descendientes vivos, y posiblemente de algunos de los enterramientos de Vinci. El objetivo es tratar de identificar elementos genéticos útiles para explorar las razones del genio de Leonardo, encontrar información sobre sus proezas físicas y quizás el envejecimiento prematuro, la zurdera, la salud y las posibles enfermedades hereditarias, para explicar percepciones sensoriales particulares, como su extraordinaria capacidad visual y su sinestesia.
-T: ¿La Argentina estuvo de algún modo involucrada en esta pesquisa para armar el árbol genealógico?
– Agnese Sabato: Viajamos allí en 2019 para dar varias conferencias sobre Leonardo y los 500 años de su muerte. En Argentina nos contactó el descendiente de un famoso ingeniero argentino, Enrique Butty: un genio de las matemáticas, el primero en entender la teoría de la relatividad de Einstein (con quien también tuvo conocidos) y sobre el que la tradición familiar transmitió una conexión con nuestro Leonardo Da Vinci. Por supuesto, al no tener el apellido Vinci fue inmediatamente obvio que no tenía nada que ver con la familia del padre de Leonardo. Pero el apellido Butty me hizo pensar en el marido de Caterina, la madre de Leonardo, con el que tuvo cinco hijos, de los que sólo uno fue varón pero que murió joven y del que actualmente no se conocen descendientes varones.
Así que nos pusimos en contacto con estas personas para averiguar la ascendencia de Enrique Butty, pero de momento no hay rastro de su bisabuelo. E incluso en el caso casi improbable de que fuera descendiente de Caterina (la madre de Leonardo) y de su marido Antonio di Piero di Andrea di Giovanni Buti, esto no sería suficiente para la genética: sería necesario encontrar primero el vínculo histórico y luego rastrear los restos de Francesco (hermano de Leonardo por parte de madre), lo que es casi imposible.