El bloque kirchnerista del Senado no se relaja tras la expulsión de Edgardo Kueider, el legislador que cayó en Paraguay tras ser acusado de contrabando, y comienza a darle forma a una nueva estrategia.
En el sector, que tiene entre sus referentes a la mendocina Anabel Fernández Sagasti, ahora van por el correntino Carlos “Camau” Espínola. Cabe recordar que este último se alejó del bloque en 2022.
Los primeros indicios los dieron días atrás los mismos referentes K que alzaron la voz en la sesión en la que se trató la expulsión de Kueider.
Inclusive, la primera en lanzar algunos dardos fue Ferández Sagasti, que tras entrablar una comunicación con la titular del Partido Justicialista, Cristina Fernández de Kirchner, soltó: “Nosotros sabíamos que se compraban senadores como se compran artefactos en la góndola de un supermercado; lo vimos. Vimos embajadas, vimos rotondas, vimos promesas de obras. Pero en el caso del senador Kueider, hubo hasta un decreto presidencial”, dijo en referencia a los directores de la represa Salto Grande.
El que fue por más es el jefe del interbloque, José Mayans: “Hubo traición al partido político. Queremos que nos devuelvan la banca que nos robaron porque si no estaban de acuerdo se tendrían que haber ido, ellos fueron elegidos por un partido”.
Más adelante, le apuntó a Javier Milei por esta crisis interna en el peronismo. “Dijo que había coimas y ratas, pero él manchó el honor del Congreso. ¿Qué se hizo acá? Se juntaron un grupo de senadores, juntaron 39 y creen que tienen el derecho a hacer lo que quieran. Traicionaron a nuestro partido y ¿cuál fue el premio? La Comisión de Asuntos Constitucionales”, señaló en relación a Kueider.
Pero en cuanto a Espínola, Mayans explicó: “Kueider me decía que tenía que hablar con Camau porque es su compañero o su socio. ¿Qué quieren que yo piense de Camau? ¿Por qué maneja las cosas que maneja Camau en este Senado con un solo voto? ¿Con tres votos? Violaron la Constitución los 39, pero ahora le quedan 37 y tienen un problema porque en cualquier momento no son más que 37 senadores. Nos acusan de que queremos las bancas, claro que sí, queremos que nos devuelvan las bancas que nos robaron, que lo hicieron por plata”.
La salida de Espínola comienza a dar que hablar, y él lo sabe. De hecho, este mismo legislador fue duramente cuestionado por Unión por la Patria por haber respaldado la Ley Bases.
Ese acompañamiento a la iniciativa de Milei llevó a que la interventora del PJ correntino, María Teresa García, realice una presentación en la Justicia para solicitar su baja como afiliado por “traición política”.
En el kirchnerismo, como se dijo anteriormente, no bajan la guardia y apuran las cosas para que la ex senadora, Ana Claudia Almirón, ocupe el lugar de Camau.
La oriunda de Paso de los Libres es del riñón de La Cámpora, y de llegar al Congreso, le daría al espacio opositor 35 votos a partir del 1 de marzo del año próximo.