Bronca y resignación por el cierre de un histórico jardín maternal mendocino

El próximo 1° de mayo cerrará sus puertas el jardín maternal Evita, perteneciente a la fundación Cachypum. Según la DGE, “desde el año 2016 están de manera irregular”.

Tal cual reza el título, sentimientos de bronca y resignación invaden a la comunidad del jardín maternal Evita, debido al cierre que sufrirá la institución el próximo 1 de mayo.

La institución educativa, que se encuentra dentro de la escuela hogar Eva Perón y depende de la Fundación Cachypum, cuenta con una matricula de casi 50 alumnos.

En las últimas horas, la comunidad educativa se movilizó hasta las afueras de la institución en el Parque General San Martín y realizó una fuerte protesta pidiendo por la continuidad del jardín.

“Nos llegó la notificación a la escuela el 5 de marzo que iban a cerrar el jardín que pertenece a la fundación Cachypum, el cual tendría que haber cerrado el 1 de marzo, pero nos dieron plazo hasta el 1 de mayo”, dijo Ariana Grenillon, uno de los padres que asistió al reclamo que se realizó el último viernes.

El establecimiento, que funciona desde hace 11 años, cuenta en la actualidad con salitas de 1, 2 y 3 años, y trabaja de 7:30 a 14:30. Además, los estudiantes que asisten a la mencionada casa de estudios, reciben una merienda.

En el lugar también funciona una escuela primaria, una secundaria, un Cens, un CCT y un Cebja.

“Por ahora es el jardín, pero así empiezan de a poco. Ya sacaron los talleres de la doble escolaridad. Inclusive, las maestras les han dicho los chicos que la escuela no va a funcionar más”, agregó Grenillon en diálogo con News Online.

La situación es desesperante, al punto que las maestras, “como no pueden expresarse por miedo a perder a su trabajo, se lo contaron a los chicos para que nos lo digan a nosotros”.

“Una de las madres se asesoró con un abogado, que va a presentar un recurso de amparo porque están vulnerando los derechos de los niños y de nosotros también porque necesitamos del jardín maternal para poder ir a trabajar”, añadió la mujer.

Grenillon percibe que la situación complicará en demasía a los padres. “Muchas personas van a perder el trabajo, no van a tener con quien dejar a los niños. En otros jardines tienen otro tipo de horario, por eso el Evita es muy elegido”.

Pese al escenario adverso, los padres no se quedarán quietos: “Vamos a hacer otra manifestación, estamos buscando apoyo de otras instituciones. La idea es llegar hasta la Legislatura”.

La palabra de la DGE y el silencio de la Fundación Cachypum

Autoridades de la Dirección General de Escuelas (DGE), indicaron a este diario que “hay un montón de irregularidades”.

Y precisaron que la fundación “no presenta la documentación correspondiente”. Además, detallaron que “no son 48 alumnos, son 26. Hay un montón de cosas que dicen que no son”.

La cartera liderada por José Thomas cortará el subsidio provincial que llegaba a dicha institución.

“Si no cumplen con los requisitos no se pueden enviar fondos públicos, que es lo que paga todo ciudadano con sus impuestos. Son fondos que va a parar a gente que no presenta ningún tipo de documentación, para comprobar que eso esté funcionando como corresponde”, explicaron.

La cartera educativa sostuvo que dicha fundación “desde el año 2016 está de manera irregular”, y aclaró que los docentes serán absorbidos por el municipio, “es decir que la DGE le quita el subsidio a esta entidad, que está de manera irregular, pero los docentes seguirán percibiendo el salario”.

También, enfatizaron que en los niños “serán reubicados en distintos jardines maternales que tiene el municipio”.

“El servicio educativo se va a seguir brindando, pero no se puede seguir enviando un subsidio a una entidad que está de manera irregular”, concluyeron.

Este medio también intentó comunicarse con los responsables a cargo de la Fundación Cachypum, quienes optaron por hacer silencio.

 

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