Este martes se cumplió un mes del femicidio de Florencia Romano, la joven de 14 años que fue asesinada en Maipú.
En la rotonda de la Virgen, en Guaymallén, familiares, amigos y allegados de la adolescente se reunieron para pedir justicia con una emotiva suelta de globos en su memoria.
A fines de 2020, Florencia Romano (14) fue golpeada y asfixiada hasta la muerte en la tarde del 12 de diciembre, y el crimen destapó un conjunto de inacciones estatales que restan esclarecer.
El principal sospechoso de haber matado a Florencia, Pablo Arancibia (33), sigue detenido con prisión preventiva.
En la última audiencia judicial, la fiscal de Homicidios Claudia Ríos enumeró el impresionante cúmulo de pruebas que comprometen al acusado, que van desde ruidos que se escuchaban en su casa hasta grabaciones de cámaras de seguridad, junto a varios testimonios.
También se abrió una causa penal y un sumario interno contra la efectiva policial Soledad Herrera, la operadora del 911 que el día del hecho decidió desestimar un llamado en el que se avisaba a las autoridades que en una casa del callejón Berra (Gutiérrez) había un episodio de violencia de género. A 350 metros de allí había una comisaría.
