La audiencia, el cual se dará esta mañana, es un momento clave para los ocho rugbiers condenados por el crimen de Fernando Baéz Sosa. Los detenidos, alojados en la Alcaidía Nº3 de Melchor Romero, fueron trasladados a la Sala II del Tribunal de Casación de La Plata, donde se podría definir sus destinos.
La defensa del particular damnificado, liderada por los abogados Fernando Burlando y Fabián Améndola, expondrá sus apelaciones ante el Ministerio Público. Uno de los puntos más importantes es el pedido de la prisión perpetua para todos los condenados. Sostiene que cada uno de ellos tiene responsabilidad en el crimen de Báez Sosa.
Por su parte, Hugo Tomei, el abogado de los ocho jóvenes condenados, buscará la absolución total de sus clientes. Tomei argumenta que el incidente fue un homicidio en riña y también insistirá en la nulidad absoluta del proceso que llevó a las condenas. La defensa cuestiona la investigación realizada por la fiscal Verónica Zamboni en Villa Gesell y busca invalidar el requerimiento de elevación a juicio presentado en noviembre de 2020.
Tanto la defensa como los abogados que representan a la familia de la víctima tendrán la oportunidad de presentar sus recursos y respaldar sus argumentos.
Por el momento, los rugbiers condenados permanecerán en la Alcaidía N°3 de Melchor Romero, separados de otros reclusos y bajo medidas de seguridad estrictas para evitar confrontaciones. “Pocos están dispuestos a pagar el costo de un traslado, mucho más en un año electoral. Si son separados quedarán expuestos en otra cárcel, podrían ser atacados. Son los presos más conocidos de la Argentina”, explicó una fuente judicial a TN.