La interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, aseguró que al ingresar al organismo se encontró con “un desorden generalizado” y se refirió al material hallado sobre el espionaje ilegal a los familiares de los tripulantes del ARA San Juan.
“Me encontré con un desorden generalizado. En la agencia (por la AFI) no hay base de datos ni hay trazabilidad. Si me piden documentación tengo que saber dónde la tengo que ir a buscar, saber de dónde salió y cómo se consiguió, y entregarla de manera formal. Prácticamente no había base de datos”.
Además, la interventora aseguró que “se encontraron cosas que se olvidaron de destrozar o destruir“, señalo en un diálogo con Radio Cooperativa.
Caamaño reveló que los documentos sobre el presunto seguimiento y espionaje a las familias de los submarinistas del ARA San Juan quedaron “en una computadora de Mar del Plata porque nadie se ocupó de decir que se destruya“.
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Y agregó: “El encargado de la delegación de Mar del Plata destruyó un montón de cosas y dejó firmado que destruía por orden del superior. Ahora está procesado y el disco que quedó del ARA San Juan quedó de casualidad”, relató Caamaño.
