En medio de la feroz interna que sacude al Frente de Todos, el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, respaldó las acciones que está llevando a cabo el “albertismo”.
A última hora del lunes, el titular de Hacienda, Martín Guzmán, reconoció que “la inflación de marzo superará el 6%”, y dijo que tras conversar con el presidente Alberto Fernández, este le confió que la gestión continuará “con la gente que esté alineada con el rumbo económico”.
Este martes, en la misma línea se pronunció el ministro Aníbal Fernández. Al ser consultado sobre qué deberían los funcionarios que no están de acuerdo con las políticas económicas, planteó: “Como mínimo, no deberían estorbar”. De esta forma, los funcionarios más cercanos al jefe de Estado se abroquelan ante las críticas de La Cámpora y de dirigentes afines a Cristina Kirchner, como el secretario de Comercio, Roberto Feletti.
En tal sentido, sostuvo que aquel que no comparta la política económica que lleva adelante Guzmán “por lo pronto debería no estorbar y dejar que se siga adelante con lo que se está haciendo, con decisiones cruciales”.
Por otro parte, Aníbal Fernández expresó sus diferencias con declaraciones públicas del diputado Leopoldo Moreau, que días atrás afirmó que Alberto Fernández “tiene la última palabra” dentro del Frente de Todos, pero no es “la única” palabra, en referencia a las disidencias planteadas por Cristina y Máximo Kirchner, entre otros dirigentes.
“Eso no me gustó. La última palabra es la del Presidente, es el que ejecuta, y todo lo demás es chamuyo. Son expresiones absolutamente innecesarias”, agregó el ministro.